Un crimen macabro ocurrió en un geriátrico cuando una mujer de 95 años fue acusada de asesinar a su compañera de cuarto a golpes.
Una mujer de 95 años fue acusada de asesinar a su compañera de cuarto a golpes.
Una mujer de 95 años, Galina Smirnova, fue acusada de asesinar a golpes a su compañera de cuarto, Nina Kravtsov, de 89 años, en un incidente ocurrido en el Seagate Rehabilitation and Nursing Center, un geriátrico de Brooklyn, Nueva York.
La policía llegó al lugar tras recibir un llamado de emergencia que alertaba sobre el violento ataque. Al ingresar a la habitación, los agentes encontraron a la víctima en su cama, con graves heridas en la cabeza y el rostro.
El auxiliar de enfermería fue quien descubrió primero la escena. Durante su ronda, encontró a Nina Kravtsov con lesiones severas en la cabeza y cubierta de sangre. Poco después, vio a Galina Smirnova en el baño, con un camisón manchado de sangre, lavándose las manos.
La mujer también tenía sangre en las piernas, lo que llevó a los oficiales a sospechar de inmediato de su participación en el asesinato. Dentro de la habitación, la policía halló una silla de ruedas con los apoyapiés faltantes, uno de los cuales estaba cubierto de sangre en el suelo, mientras que el otro apareció fuera de la habitación, bajo una ventana.
Nina Kravtsov fue trasladada de urgencia al hospital NYU Langone de Brooklyn, donde los médicos confirmaron su muerte por un traumatismo contundente. La fiscalía de Brooklyn acusó a Galina Smirnova de homicidio en segundo grado y tenencia ilegal de un arma en cuarto grado. La mujer fue arrestada el 16 de septiembre y, al día siguiente, se presentó ante la justicia, que ordenó su detención preventiva.
El fiscal solicitó que se realizara una evaluación de salud mental a Smirnova para determinar su estado, pero el juez rechazó la petición, pese a la oposición de la defensa. La investigación sigue su curso y el caso mantiene conmocionada a la comunidad del geriátrico, que aún no puede procesar el crimen ocurrido dentro de sus paredes.
Nina Kravtsov, quien había perdido a su familia durante el Holocausto, fue una mujer marcada por las tragedias de la vida. Se convirtió en enfermera en Ucrania antes de emigrar a Estados Unidos.
Vivió en Brighton Beach con su esposo hasta su fallecimiento y luego se mudó al geriátrico. Su hija, Lucy Flom, describió a su madre como una mujer sacrificada y muy dedicada, quien luchó por darle una buena educación.
