menu
search
Gritos de la Tierra Santa Fe | animales | Venado de las pampas

Venado de las pampas: una especie en peligro crítico de extinción que aún resiste en los Bajos Submeridionales

Son animales autóctonos que poblaban la llanura y fueron reducidos por la caza, la pérdida de hábitat y el ataque de predadores. Buscan declarar la zona área protegida.

Considerada durante mucho tiempo una especie extinguida en la provincia de Santa Fe, el venado de las pampas -un animal autóctono que durante mucho tiempo habitó profusamente la región- todavía ocupa una pequeña porción del noroeste de la provincia de Santa Fe, en la zona de los Bajos Submeridionales. Catalogado como “en peligro crítico de extinción”, quienes lo estudian estiman que en la última década su presencia se ha hecho más escasa y que apenas quedarían pocas decenas en los pastizales naturales típicos de esa zona de la provincia.

Tras haber sido devastado en un principio por los cazadores, que buscaban y vendían su piel, los motivos que acorralaron a esta especie, antes muy común a pequeñas porciones del territorio argentino tienen que ver, en las últimas décadas, con el avance de la frontera agropecuaria y con la proliferación de predadores como perros y chanchos salvajes que los atacan. También padecen los extremos climáticos como sequías e inundaciones y las enfermedades transmitidas por el ganado.

Tras haber sido una de las especies más abundante de las llanuras pampeanas en el siglo XIX, hoy se estima que quedan en Argentina apenas unos 2.000 ejemplares en cuatro núcleos geográficos: Corrientes, noroeste de Santa Fe, la bahía de San Borombón en la provincia de Buenos Aires y en la provincia de San Luis. Se estima que la población registrada en la zona de los Bajos Submeridionales santafesinos no supera los 40 0 50 animales, lo que lo ubica en peligro crítico de extinguirse.

Venado de las Pampas.jpg
En la Argentina apenas quedan unos 2.000 ejemplares de una especie que era muy común en la llanura pampeana.

En la Argentina apenas quedan unos 2.000 ejemplares de una especie que era muy común en la llanura pampeana.

La creación de un área natural protegida en los Bajos Submeridionales, considerados un reducto único de pastizales naturales no sólo en Santa Fe sino en toda la región, sería clave para intentar salvar esa especie y otros animales autóctonos en riesgo. Así lo explicó Andrés Pautasso, naturalista y coordinador del museo Florentino Ameghino, en una entrevista con Aire Digital.

Mapa rojo

Bernardo Lartigau, de la Fundación Vida Silvestre, explicó que existen muchas especies de ciervos en Argentina, tanto nativas como exóticas (introducidas) que inciden de manera negativa sobre los otros cérvidos. “Uno de los más abundantes es ahora uno de los más raros y amenazados, el venado de las pampas”, dijo el experto, quien agregó que a nivel regional quedan aún poblaciones en la zona del Pantanal en Brasil y en algunos campos de Uruguay, donde hacen ganadería en pastizales naturales.

Lartigau señaló que en Argentina quedan cuatro núcleos poblacionales de venados de las pampas: el más importante es el de San Luis con unos 1.000 individuos, luego el de Corrientes y en último lugar la provincia de Buenos Aires con alrededor de 150 a 200 ejemplares y finalmente Santa Fe, donde no llegaría al medio centenar. “En Santa Fe hay muy poquitos. También hay una población en los bajos inundables al este de los esteros del Ibera en Corrientes, pero la zona está presionada por las plantaciones de pinos”, dijo el biólogo, quien recordó que la especie sufrió antiguamente una fuerte presión por cazadores que comerciaban las pieles, para luego casi extinguirse por la destrucción sistemática de su hábitat, que son los pastizales naturales pampeanos.

Leer más ► Granja La Esmeralda: ¿ignorancia, mala interpretación o ardid político?

“Si se planta un pinar en lo que era un pastizal natural se convierte ese ambiente y se acorrala a los animales en ambientes residuales que se fragmentan y parecen islas. Se vuelven mucho más vulnerables así”, agregó, para señalar que los perros sueltos en los campos (no siempre salvajes) son un problema enorme, de difícil solución.

Desde la Fundación Vida Silvestre informaron que el índice de disminución de la especie se calcula en un 4% anual, ya sin incidencia de la caza furtiva pero si por la pérdida sostenida de hábitat y la acción de predadores como perros sueltos y chanchos cimarrones, lo que coloca al venado de la Pampas ante un peligro cierto de extinción total.

El capítulo santafesino

Tras haber pensado que el venado de las pampas había desaparecido en Santa Fe, en los años 80, los pobladores locales detectaron la presencia de algunos individuos en la zona de los Bajos Submeridionales. La existencia de esa población de animales fue científicamente comprobada por un trabajo de campo del cual participó Pautasso, a través de evidencias como huellas, astas y fotos de la especie.

Venado de las Pampas 3.jpg
En el noroeste santafesino, las severas sequías y también las inundaciones en los últimos diez años afectaron al pequeño grupo de venados que todavía sobrevive.

En el noroeste santafesino, las severas sequías y también las inundaciones en los últimos diez años afectaron al pequeño grupo de venados que todavía sobrevive.

En el año 2015 se lanzó a nivel nacional un programa llamado “Extinción cero” que permitió que la provincia de Santa Fe accediera a financiamiento para proteger a esa especie. Se armó un programa para trabajar en el terreno que involucró al Museo Ameghino, al gobierno provincial y a la asociación Bios para instalar algunas cámaras que registraron fotos y videos de animales ratificando que había aún una población en pie.

“La población sabemos que está, la caza furtiva es cada vez menos una amenaza porque casi no se caza desde hace tiempo pero los perros son un problemón. También a veces caen en pozos de agua, por lo que se busca alambrarlos”, explicó Alejandro Larriera, profesor de manejo de fauna y flora de la UNL.

Pautasso, por su parte, agregó que lamentablemente en los últimos 10 años esa población de venados, que ya era pequeña, se vio reducida por eventos climáticos y otras causas para estimarla en la actualidad en pocas decenas de ejemplares muy difíciles de localizar. Avanzar en la creación de un área protegida es clave para intentar salvar a la especie y a otras, también amenazadas, que pueblan el norte de la provincia.

Leer más ► Qué otros animales silvestres quedan atrapados en el dilema del carpincho Pancho

Estrategias de protección

Existen diferentes formas de abordar el problema de la posible extinción de una especie nativa. Una de ellas tiene que ver con involucrar a los dueños de los campos donde aún existen pastizales naturales en la conservación del venado de las Pampas, y una herramienta a favor de eso pueden ser beneficios fiscales.

Lartigau señaló que desde Vida Silvestre han elaborado estrategias de buenas prácticas de ganadería en pastizales naturales, un modelo bajo el cual “podría encajar todo” pero que todavía no logró imponerse entre una mayoría de productores, poco acostumbrados a introducir cambios en la forma de llevar adelante su negocio. “Es un modelo basado en el manejo más que en los insumos que permite hacer ganadería conservando el pastizal natural, es una actividad que sin prohibir lo productivo permite coexistir con el venado”.

Así se planteó en el partido de General Lavalle de la provincia de Buenos Aires, donde los productores podrán obtener desgravaciones de los impuestos municipales si realizan un plan de manejo de sus pastizales destinado a proteger a esa especie.

Dejá tu comentario