La planta que sobrevive sin agua y florece igual en pleno enero
Sus flores parecen de papel y abren con el sol más fuerte. Es una de las pocas especies que puede crecer en pleno verano, sin riego constante ni cuidados especiales.
Una de las plantas más resistentes al calor del verano.
Una flor que ama el calor
Originaria de Sudamérica, esta planta se adapta con facilidad a suelos secos y expuestos. Prefiere el pleno sol, donde despliega su colorido: rosa, fucsia, amarillo, naranja o blanco.
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Sus flores, que se abren al amanecer y se cierran al atardecer, resisten sin problemas jornadas de más de 35 °C.
Sus flores se abren con el sol y llenan los jardines de color, incluso sin riego diario.
Cuidados básicos de la Portulaca
La Portulaca florece desde noviembre hasta el otoño y no necesita demasiada atención. Basta con plantarla en un lugar soleado y regarla una o dos veces por semana. Su crecimiento es tan rápido que en pocas semanas puede cubrir bordes, canteros o macetas colgantes con un manto de flores.
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Por su resistencia y bajo mantenimiento, es una aliada de quienes buscan color sin riego constante. Incluso en épocas de sequía o vacaciones, cuando otras especies se apagan, la Portulaca se mantiene viva y floreciente.
