El miércoles por la noche, el Big los citó en el living y les anunció que todos quedaron en placa. "No me gustan las faltas de respeto, agravios y ofensas. Pueden ser estrategas y grandes jugadores, pero sin apelar al juego sucio. Por estos motivos informo que tomé la decisión severa de que cada uno de ustedes está nominado a partir de este momento. Todos están en placa, a excepción del líder de la semana, que mantiene su inmunidad, pero no podrá sacar a nadie de placa”, expresó indignado.
Y eso no fue todo. Acto seguido, se mostró profundamente decepcionado: “No me gusta que maltraten mi casa, subiéndose con los pies calzados sobre las camas, sillas y sillones, tirándose almohadones con el riesgo de dañar cámaras y micrófonos, que limpien mal y poco; que vivan aquí como si no les importaran los más mínimos cuidados. A esta casa deben tratarla como si fuera la de ustedes. No me gusta que no conserven los alimentos de manera óptima y recién después de reiteradas advertencias hayan obedecido guardar la comida en los lugares que corresponden. Me ha llenado de angustia observar cómo los alimentos se descomponían en los placares del dormitorio. Ojalá puedan reflexionar sobre cuestiones como la solidaridad, compañerismo y empatía”.
Con este comunicado, el único que se salvó fue Bautista, que permanecerá tranquilo al menos una semana más.