Un cliente compartió en Google su experiencia y el ticket que generó repercusión: gastó $74.500 en una merienda. Según la factura, pidió dos cappuccinos italianos a $17.500 cada uno, un alfajor santafesino por $7.500 y un sándwich de mortadela que costó $32.000. La suma final, con impuestos, dio exactamente $74.500,02.
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Tomar un café en La Ideal es una verdadera experiencia.
Lejos de quejarse, el hombre acompañó la publicación con un comentario elogioso: “¡Un lugar simplemente sensacional! Definitivamente vale la pena visitarlo. No puedes quejarte de los precios; son más altos precisamente por la ubicación”. Sus palabras reflejan lo que muchos clientes remarcan: La Ideal no solo es una confitería, sino una experiencia que combina tradición, arquitectura y un servicio que intenta sostener la esencia de la ciudad.
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Inaugurada en 1912, La Ideal fue testigo de más de un siglo de historia porteña y en los últimos años recuperó gran parte de su esplendor gracias a una restauración completa. Hoy se mantiene como un espacio para disfrutar desde un café hasta almuerzos y cenas, siempre en un marco de elegancia que la distingue frente a otras confiterías históricas.
