El economista Carlos Seggiaro analizó en diálogo con AIRE los últimos datos de inflación difundidos por el INDEC, que marcaron un aumento del 1,9% en agosto, la cifra más baja desde 2018 en Argentina. Según explicó, el índice refleja una desaceleración, pero “no coincide con la percepción real de los consumidores” debido a una falla de cálculo.
"Se trata de una desprolijidad. Si se usara el nuevo índice, el resultado sería distinto”, afirmó el economista Carlos Seggiaro.
Seggiaro advirtió que el cálculo del INDEC “tiene un problema metodológico”
Respecto al informe del organismo, Seggiaro aclaró que “no es que estén mintiendo abiertamente, sino que hay un problema metodológico que surge de la canasta de bienes que se usa para el cálculo de la inflación, que está desactualizada y no se corresponde con el consumo actual de los argentinos. Eso genera un desfase”.
El economista recordó que en 2018 se elaboró una nueva canasta, más acorde a los hábitos de consumo actuales, pero “el Gobierno argentino se negó a empezar a utilizarla”. “Hay alguna culpa del INDEC en esto. Se trata de una desprolijidad. Si se usara el nuevo índice, el resultado sería distinto”, afirmó en diálogo con AIRE, en el programa Una Tarde a la Vez.
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Seggiaro también señaló que el Fondo Monetario Internacional (FMI) cuestionó al país por no haber implementado esa actualización. “Es muy probable que empiece a utilizarse el año que viene. El discurso oficial tiene poco que ver con la sensación que tiene la gente en la calle”, agregó.
Los datos del INDEC
El INDEC informó que la inflación de agosto fue del 1,9%, por debajo de lo esperado por las consultoras privadas (entre 2% y 2,2%). En lo que va del año, el índice acumula 19,5%, y en la comparación interanual alcanzó el 33,6%, el registro más bajo desde julio de 2018.
Entre los rubros con mayores aumentos se ubicaron Transporte (3,6%), impulsado por el alza en combustibles y adquisición de vehículos; Bebidas alcohólicas y tabaco (3,5%), y Restaurantes y hoteles (3,4%). En el otro extremo, Recreación y cultura subió solo 0,5%, mientras que Prendas de vestir y calzado registró una caída del 0,3%.
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