El entrenador argentino del Sevilla, Jorge Sampaoli, está en la cuerda floja a la luz de la mala campaña del equipo andaluz, en el que juegan sus compatriotas Marcos Acuña, Alejandro "Papu" Gómez, Gonzalo Montiel, Eric Lamela y Lucas Ocampos.
Según el diario Mundo Deportivo, "la crisis del Sevilla se agravó tras la goleada recibida el sábado por 6-1 contra el Atlético de Madrid" y Sampaoli "aparece cada vez más debilitado y con jugadores como Acuña cuestionando las herramientas del entrenador y las instrucciones tácticas".
Sevilla está cerca de la zona del descenso y el mal presente futbolístico hace peligrar la continuidad del DT argentino ya que en las últimas horas los rumores sobre su posible salida "están creciendo", según la prensa española.
El jueves próximo Sevilla afrontará como local al Fenerbahce de Turquía por la Europa League y durante las próximas semanas por la Liga jugará partidos con rivales directos para salvar la categoría.
Después de la cita internacional, el equipo que tiene tres campeones mundiales (Acuña, Montiel y Gómez) enfrentará a Almería, Getafe, Cádiz, Celta y Valencia, todos comprometidos con el descenso.
Por otra parte, en lo institucional Sevilla también atraviesa una difícil situación judicial que podría determinar la intervención del club al no lograr la actual dirigencia "sacar adelante" las cuentas de la entidad.
Qué pasó entre Jorge Sampaoli y Marcos Acuña
Luego de la vergonzosa derrota por 6-1 frente al Atlético de Madrid, Marcos Acuña fue autocrítico y dejó frases resonantes. El lateral izquierdo que fue campeón del Mundial en Qatar fue titular en el duelo frente al Colchonero y al terminar el compromiso se acercó a los micrófonos y expuso su enfado por el resultado y el mal juego de su equipo. “Sensación mala. Cuando un equipo te hace seis goles, ¿qué sensación te puede quedar? Jugamos muy mal. Nos dan las herramientas para sacar los partidos y se ve que no las entendemos o no sé. Ya sobrepasa todos los límites. Hoy jugamos muy mal y por eso nos llevamos esta derrota”, sentenció.
Sus palabras fueron interpretadas como una crítica hacia Sampaoli, quien ha quedado en la cuerda floja. Es que el partido pasado, en la caída 3-2 frente a Osasuna, se vivió un episodio puntual que expuso la falta de conexión entre el jugador y el DT cuando el ex Racing tomó un papel con indicaciones del entrenador y lo destruyó sin siquiera mirarlo.
“Para un entrenador, muchas veces, trasladar una idea global puede ser automática o a veces no pasar nunca”, declaró por su parte el técnico oriundo de Casilda después del 6-1 que sufrió Sevilla. Con respecto a su futuro, declaró: “Es normal que se mire al entrenador. Vine en una situación difícil, estoy en una situación difícil, intento hacer lo posible para ayudar al club. No lo decido yo, pienso en el partido del jueves, el club hará las evaluaciones que tenga que hacer. Yo pienso en mi trabajo para levantar al equipo para ganar el jueves y el domingo”.
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