SpaceX completó con éxito la undécima prueba de vuelo del cohete Starship

Durante la fase inicial, los motores Raptor se encendieron correctamente y ejecutaron la maniobra de separación en caliente entre etapas. El propulsor Super Heavy consiguió un amerizaje controlado en el golfo de México, uno de los objetivos clave del ensayo para avanzar en la reutilización de componentes.

LEER MÁS ► ¿Por qué OPEN IA invertirá en Argentina?: las razones de la expansión de la inteligencia

Objetivos técnicos: Starship y el desarrollo del Super Heavy

La etapa superior del Starship completó su ascenso planificado y entró en fase suborbital. Durante el vuelo, la nave desplegó ocho satélites simuladores de Starlink, que siguieron la misma trayectoria suborbital antes de desintegrarse al reingresar en la atmósfera, tal como estaba previsto.

En el espacio, Starship reencendió uno de sus motores Raptor para preparar el reingreso, donde puso a prueba su escudo térmico bajo condiciones de alta fricción y temperatura. Además, ejecutó una maniobra de inclinación controlada, diseñada para simular el enfoque final que realizará en futuras misiones cuando regrese a la base de lanzamiento.

El ensayo concluyó con éxito cuando la nave amerizó en el océano Índico tras poco más de una hora de vuelo, según confirmó SpaceX.

LEER MÁS ►

Desde la compañía explicaron que este vuelo tiene como propósito recopilar datos para la próxima generación del propulsor Super Heavy, evaluar el rendimiento del escudo térmico del Starship y perfeccionar maniobras de descenso y recuperación para vuelos reutilizables.