Este miércoles a las 3.48 horas, la Nasa pudo lanzar finalmente su megacohete SLS hacia la Luna. La misión, llamada Artemis 1, es la primera de varias que permitirán instalar una base permanente allá, con el objetivo de lograr una presencia permanente de humanos en el satélite. "Son 50 años de desarrollo tecnológico", dijeron a AIRE desde la Nasa.
El lanzamiento se hizo de noche desde la plataforma 39B del Centro Espacial Kennedy de Cabo Cañaveral, Florida. Se retrasó 44 minutos porque fue necesario reemplazar una conexión informática y subsanar fugas intermitentes detectadas horas antes durante el repostaje de la etapa superior con hidrógeno y oxígeno líquidos.
De esta manera, la Nasa inició una nueva era de exploración espacial.
Antes del histórico lanzamiento, AIRE conversó con el ingeniero de la Nasa, Carlos García Galán, desde el Centro Espacial Kennedy y contó detalles del nuevo programa lunar llamado Artemis. "La nave Orión es un desarrollo totalmente nuevo. Es una cápsula y un módulo de servicio como había en el programa Apolo, pero totalmente diferente", dijo García Galán. "Tiene otras características. Son 50 años de desarrollo tecnológico", destacó el ingeniero.
Las misiones Apolo estuvieron pocos días en la Luna (unos 5 en promedio), pero la nave Orión está desarrollada para poder estar en la órbita de la Luna durante meses, incluso sin acoplarse a nada. "Podríamos estar orbitando con cuatro personas durante 21 días", contó el experto a AIRE.
Carlos García Galán es jefe de la oficina de integración del módulo de servicio que realizó la Agencia Espacial Europea (ESA) para acoplar a la nave Orión de la Nasa. Este sistema nave-módulo de servicio junto, es lo que viajará a la órbita de la Luna una vez que abandonen el cohete de lanzamiento.
"El módulo de servicio tiene todo el combustible y los motores para hacer la propulsión para llegar a la órbita de la Luna, entrar en la órbita, salir y volver a la Tierra. Tiene también los paneles solares que generan toda la energía. También tiene tanques de oxígeno y nitrógeno para mantener a la tripulación viva. Sin el módulo de servicio no podríamos ir a ningún sitio", reveló García Galán.
Pero además de la nave y el módulo de servicio, la misión es impulsada por el cohete más poderoso que la Nasa haya desarrollado jamás: el Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS, por sus siglas en inglés).
Este cohete fue desarrollado con el mismo diseño del transbordador espacial, pero mucho más evolucionado. "El cohete está compuesto por varias etapas. Decidimos evolucionar cosas que teníamos ya del transbordador espacial, como, por ejemplo, los cohetes de combustible sólidos, que son los dos que están al lado del cohete, y también el combustible de oxígeno e hidrógeno que utilizamos en el transbordador espacial. Esta vez, los cohetes de combustible sólidos tienen una fase más que las que tenía el transbordador espacial y la parte principal del cohete tiene más combustible y tiene cuatro motores. El transbordador espacial tenía tres", contó el ingeniero.
"Esto es para llegar a la órbita de la Tierra", aclaró García Galán. "De ahí tenemos que utilizar otra etapa para ir en dirección a la Luna, la tercera etapa del cohete, lo que va a impulsar a la nave Orión hacia la órbita de la Luna", dijo en referencia al módulo de servicio europeo que, una vez que el cohete deje de ejercer su función, pasará a impulsar a la nave Orión a la órbita de la Luna.
"Para llegar a lo que es la órbita de la Luna, son seis días. Y después, ajustamos la órbita, que son otros tres días. Entonces estamos en la órbita final unos diez días después de haber lanzado el cohete y más o menos lo mismo para salir de la órbita de la Luna", dijo. En total, la misión durará unos 43 días. Unos diez días para ir, otros diez para volver y, el resto, serán para que la nave Orión le dé dos órbitas muy amplias a la Luna.
Este sistema de lanzamiento fue desarrollado durante unos 15 años.
Cuál es el objetivo de las misiones Artemis a la Luna con humanos
Carlos García Galán le contó a AIRE que el objetivo final del programa Artemis es "volver a Marte".
"Para llegar a Marte tenemos que desarrollar una serie de tecnologías y conocimientos de cómo vivir en el espacio profundo antes de embarcarnos en una misión que pueden ser de dos o tres años. El mejor campo de pruebas para desarrollar los conocimientos y probarlo todo es la Luna", dijo el experto.
"Si sale todo bien este lunes, más o menos en el 2024 saldría la segunda misión, esta vez tripulada, a la Luna", finalizó.