El policía Gabriel Sanabria regresó este lunes a su San Javier natal, tras 73 días de luchar por su vida luego de ser atacado a balazos en un operativo de control vehicular en la zona sur de Rosario. Desde las primeras horas de la tarde, una gran cantidad de vecinos se reunió en el ingreso a la localidad para recibir al suboficial, que llegó alrededor de las 17 encabezando una caravana de más de cinco cuadras plagada de autos, motos, bicicletas y personas acompañándolo a pie.
Fue una jornada de mucha emoción en San Javier. Con globos, pancartas y lágrimas en los ojos, cada vecino recibió a Gabriel como un verdadero héroe, y él agradeció todas las muestras de afecto desde la ventanilla de la traffic de la Policía de Santa Fe que lo trasladó por las calles de la ciudad hasta llegar a su casa.
El móvil de AIRE acompañó de forma exclusiva la recorrida de Gabriel Sanabria por las calles de San Javier. Los gritos y los aplausos de los sanjavierinos se mezclaron con las bocinas y la sirena de la autobomba que formó parte de la emotiva caravana.
En la previa a su llegada, su papá Fabián, dijo que fueron "73 días difíciles, pero gracias a Dios tuvo un final feliz". "Para nosotros es una alegría muy grande. Es emocionante que la gente lo reciba y le dé tanto cariño", remarcó Fabián sobre la multitudinaria bienvenida que la ciudad le dio a su hijo, un reconocimiento a no haber bajado los brazos durante más de dos meses entre la internación y el comienzo de su rehabilitación.
"Gabriel la peleó un montón y logró salir adelante. Gracias al Heca de Rosario y todas las oraciones de la gente, logró salir adelante, va a estar acá y va a seguir su recuperación", sostuvo Fabián.
Después de los 73 días de calvario en Rosario y una eufórica bienvenida en las calles de San Javier, Gabriel llegó finalmente a su casa donde se fundió en un abrazo con toda su familia. Hoy le queda por delante un largo tratamiento de rehabilitación, pero el suboficial aseguró que, apenas esté totalmente recuperado, quiere volver a trabajar en la Policía.
El ataque
El suceso ocurrió el 27 de mayo, a las 2.30 de la madrugada y se dio a partir de una persecución policial que comenzó en Moreno a la altura de avenida Battle y Ordoñez, de la ciudad de Rosario. Allí, los implicados en el ataque fueron interceptados por agentes policiales que ordenaron detener el vehículo en el que transitaban, un Peugeot 206, para un control.
Sin embargo, el conductor dobló hacia el norte por bulevar Oroño y nuevamente por calle Madre Cabrini en sentido contrario al de circulación, indicaron desde fiscalía. Al llegar a la altura de Arijón al 400, el oficial Gabriel Sanabria se acercó al coche y desde adentro del auto, del lado del acompañante, uno de los ocupantes sacó un arma de fuego y disparó contra el uniformado causándole graves heridas en el abdomen.
Sanabria pasó 55 días internado en el Hospital de Emergencias Dr. Clemente Álvarez (Heca) de Rosario donde luchó por su vida, y el 21 de julio recibió el alta médica. Fue trasladado a una clínica de rehabilitación y comenzó su recuperación integral.
Este lunes, Gabriel Sanabria volvió a su San Javier natal en medio de un multitudinario y emotivo recibimiento, para continuar su rehabilitación rodeado del afecto de todos sus seres queridos.
Temas