El Vaticano ya colocó el tradicional conducto por donde saldrá el humo blanco o negro durante el cónclave que elegirá al sucesor de Francisco.
En medio de una fuerte expectativa mundial, el Vaticano instaló este viernes la tradicional chimenea sobre la Capilla Sixtina, desde donde se anunciará si los cardenales alcanzaron un consenso para elegir al nuevo Papa, tras la muerte de Francisco.
Un grupo de bomberos de la Santa Sede subió al tejado del histórico edificio para colocar el conducto, mientras cientos de turistas recorrían la plaza de San Pedro.
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Aunque pasó casi desapercibido, algunos visitantes registraron la escena y compartieron videos en redes sociales.
El cónclave comenzará el próximo miércoles 7 de mayo y reunirá a 133 cardenales, que se encerrarán en la Capilla Sixtina para participar de las votaciones a puertas cerradas.
Durante este proceso, los votos se queman en una estufa especial. Si no hay acuerdo, el humo que sale por la chimenea es negro. Pero si los cardenales eligen a un nuevo Sumo Pontífice, el humo será blanco, señal del esperado “Habemus Papam”.
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La Iglesia católica prevé hasta cuatro votaciones por día —dos por la mañana y dos por la tarde— hasta lograr los dos tercios necesarios para consagrar al nuevo líder espiritual de más de 1.300 millones de fieles en todo el mundo.
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