El agresor, llamado "groomer", suele hacerse pasar por alguien de la misma edad que el niño o niña para ganar su confianza y luego inducirlo a realizar actividades de índole sexual o a enviar material sensible.
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El grooming fue reconocido como delito penal en Argentina, estableciendo penas de prisión para quienes intenten establecer contacto con menores a través de medios tecnológicos con intenciones de abuso. Este delito suele derivar en distintas formas de explotación, desde la obtención de material comprometedor hasta el intento de encuentro físico con la víctima. Además de los daños físicos, el grooming afecta gravemente la salud mental y emocional de quienes lo sufren.
Consejos clave para prevenir el grooming
Para evitar situaciones de grooming, es esencial mantener ciertas precauciones en el uso de redes sociales y aplicaciones de mensajería. A continuación, algunas recomendaciones importantes:
- Mantener las redes sociales en modo privado: esto permite que solo personas conocidas puedan ver o interactuar con las publicaciones.
- Evitar compartir información personal o imágenes comprometedoras: en el entorno virtual, es común que las personas no siempre sean quienes dicen ser.
- Desactivar la cámara web cuando no se utiliza: de este modo, se reduce la posibilidad de que alguien acceda de forma remota sin permiso.
- Reportar cualquier mensaje incómodo o agresivo: ante cualquier comportamiento sospechoso, es importante avisar a un adulto de confianza.
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Con la ley 26.904, sancionada en 2013, el acoso sexual virtual se incorporó al Código Penal, estableciendo penas de prisión para adultos que intenten contactar a menores con fines sexuales.
Guía para padres y tutores: cómo proteger a los hijos en internet
Si un padre, madre o tutor detecta una situación de grooming, es fundamental seguir ciertos pasos:
- Guardar todas las pruebas: no eliminar mensajes, fotos o videos; estos son elementos clave para una denuncia efectiva.
- Evitar interactuar con el acosador: no es recomendable hacerse pasar por el menor para contactar al groomer.
- Realizar la denuncia: el grooming es un delito y se debe denunciar en comisarías, fiscalías o llamando al 137, una línea nacional de asistencia las 24 horas.
Además, acompañar a los hijos en el uso de dispositivos y redes sociales, así como estar al tanto de las aplicaciones que utilizan, aumenta su seguridad y previene estos riesgos.
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Qué es el grooming y por qué es un delito en Argentina
En casos de duda o sospecha, es posible recurrir a la Unidad Judicial Especializada del Ministerio Público Fiscal, como en el caso de Córdoba, donde se atienden denuncias de grooming y otros delitos virtuales.
El grooming como una forma de abuso sexual y sus graves consecuencias
Los groomers buscan manipular emocionalmente a menores con distintos fines, desde obtener contenido sexual hasta comercializar el material en redes de explotación. Esta manipulación no solo afecta a los menores en el plano psicológico, sino que también puede tener efectos físicos devastadores.
La intervención de las familias y del entorno escolar es clave para identificar y detener a los responsables de estos delitos, generando un ambiente seguro para los niños, niñas y adolescentes.
