Ni Carlos Keen ni Areco: escapada a un pueblo bonaerense que combina gastronomía y naturaleza
A poco más de 160 kilómetros de Buenos Aires, se encuentra una localidad que es perfecto para disfrutar de comida casera, tradiciones rurales y una de las fiestas más dulces del país.
Rawson se convirtió en el destino preferido de quienes buscan una escapada gastronómica con sabores auténticos.
Cada fin de semana, cientos de personas eligen diferentes destinos para una escapada del ritmo acelerado de la ciudad para descubrir nuevos pueblos en la provincia de Buenos Aires. Entre ellos, Rawson, una localidad del partido de Chacabuco, se destaca por su encanto rural y su propuesta gastronómica.
Con calles tranquilas, casas antiguas y vecinos que conservan la tradición del interior, este pequeño pueblo invita a desconectarse y disfrutar de sabores auténticos en un entorno donde el tiempo parece haberse detenido.
A solo dos horas de CABA, Rawson combina historia, gastronomía y naturaleza. Su identidad se forja en torno a los productos locales, las ferias artesanales y las celebraciones comunitarias, que reflejan la calidez de su gente y la riqueza de su cultura.
La Fiesta del Alfajor Artesanal atrae a cientos de visitantes con sus ferias, concursos y espectáculos.
La Fiesta del Alfajor Artesanal: el evento más dulce del año en Rawson
El mayor atractivo de Rawson es, sin dudas, la Fiesta del Alfajor Artesanal, que se realiza cada año y convoca a cientos de visitantes de toda la provincia. Productores locales y reposteros de diferentes puntos del país se reúnen para ofrecer alfajores de elaboración casera, con rellenos, coberturas y recetas que varían según cada familia o emprendimiento.
Durante la celebración, el pueblo se llena de ferias gastronómicas, música en vivo, concursos y degustaciones que transforman las calles en un verdadero festival de sabores.
Qué hacer en Rawson, el corazón gastronómico de Chacabuco
Además de su propuesta culinaria, Rawson ofrece actividades que combinan descanso, historia y naturaleza:
Caminar por sus calles y plazas antiguas, donde se respira el espíritu de los pueblos bonaerenses.
Visitar la Parroquia San Juan Bautista y las casonas centenarias, que conservan el estilo clásico del siglo pasado.
Recorrer la feria de artesanos y productores locales, ideal para descubrir dulces, licores y tejidos regionales.
Probar los platos típicos en restaurantes y bodegones familiares, con recetas transmitidas de generación en generación.
El entorno rural también invita a disfrutar de paseos al aire libre, recorridos por la llanura pampeana y tardes de picnic bajo los árboles. En cada rincón del pueblo, la vida de campo se mezcla con el aroma a comida casera, creando una atmósfera única para quienes buscan una escapada diferente.
Escapada a Buenos Aires, Rawson (2)
Las calles y plazas de Rawson conservan el encanto típico de los pueblos bonaerenses.
Tradición, calma y sabor
Rawson no solo es sinónimo de gastronomía, sino también de vida comunitaria y hospitalidad. Sus habitantes mantienen vivas las costumbres rurales a través de celebraciones patronales y encuentros culturales, que fortalecen el sentido de pertenencia y atraen a nuevos visitantes cada año.
Con su clima templado, sus paisajes tranquilos y su oferta gastronómica destacada, este pueblo de Chacabuco se posiciona como una de las escapadas bonaerenses más encantadoras para disfrutar durante todo el año.
