Vecinos de Candioti Norte se contactaron con AIRE para denunciar el constante ruido de un bar en Mitre y Castellanos, exigiendo que se respeten las normativas de convivencia.
Foto ilustrativa.
Desde mayo de 2024, los vecinos de Candioti Norte manifiestan su descontento con un bar ubicado en la intersección de Mitre y Castellanos, que perturba la tranquilidad del barrio. El principal problema que enfrentan es el volumen elevado de la música. Según el testimonio de un vecino que se contactó con AIRE, se escucha todos los días, desde las 18 horas hasta las 3 o 4 de la mañana.
Esta situación, según los residentes, infringe las normativas locales sobre ruidos molestos y la convivencia ciudadana.
LEER MÁS► Santa Fe: un paciente salió del hospital con el portasuero para ir a comprar fernet
Los vecinos afectados realizaron múltiples denuncias ante la Municipalidad de Santa Fe y el área de control municipal, presentando los números de denuncia 40269, 45469, 50070, 50168, 51396 y 51748. A pesar de contar con pruebas en video que evidencian el ruido constante durante la noche, la situación sigue sin solución.
Las actas de infracción emitidas no lograron generar una respuesta efectiva por parte de las autoridades.
Según los testimonios de los residentes, en diciembre de 2024 se llevó a cabo una reunión con el área de Control municipal, pero hasta el momento no se tomaron medidas para resolver el problema. Los vecinos señalan que la ordenanza de Nocturnidad de 2022, que prohíbe los bares a cielo abierto con música a volumen alto, no se está aplicando, dejando al bar operar fuera de la normativa.
A pesar de las quejas, los residentes aseguran que no buscan la clausura del bar, sino que exigen que se respeten las normas de convivencia y descanso, de acuerdo con lo establecido por la ordenanza.
"No queremos que dejen de trabajar, solo que respeten la convivencia ciudadana y la ordenanza", afirman.
LEER MÁS► Violencia de género en Santa Fe: una mujer fue atendida en el Cullen tras ser golpeada por su pareja
Según el testimonio del vecino que se contactó con AIRE, varios de los afectados tomaron la difícil decisión de mudarse debido a la imposibilidad de descansar en sus viviendas. Otros recurrieron a métodos como dormir con auriculares o tapones para los oídos, pero el ruido sigue siendo una constante perturbación. La situación llegó a un punto crítico, y los vecinos claman por una solución que les permita recuperar la paz en sus hogares.
A pesar de haber elevado múltiples cartas a la municipalidad y haber presentado las denuncias correspondientes, los vecinos no recibieron una respuesta satisfactoria.
Te puede interesar
