El sábado pasado, aparecieron miles de peces muertos en la orilla de la Laguna del Plata, en la localidad de Vera y Pintado, Santa Fe. El fenómeno se debe a la falta de oxígeno en el agua, generada por la combinación entre las altas temperaturas y la bajante histórica, ambas consecuencias de la crisis climática global. Desde el Ministerio de Ambiente y Cambio Climático de la provincia de Santa Fe están evaluando qué hacer con los peces, mientras tanto, el encargado del camping Daniel Giménez, confirmó a AIRE que "se están empezando a pudrir y el olor es cada vez más fuerte y nauseabundo".
Por su parte, Erika Gonnet, titular de la cartera de Ambiente a nivel provincial, había indicado el lunes que "se estudia la factibilidad de sacar los peces muertos de la laguna, teniendo en cuenta no solo de que se trata de un lugar al que es difícil acceder con maquinaria por el tipo de suelo, sino también el análisis de los especialistas biólogos sobre las consecuencias de que los peces queden allí".
"Lo estamos evaluando teniendo en cuenta las características del lugar y con el respaldo de ver qué pasa si eso queda, y adónde lo llevamos si lo sacamos. Pasa en diferentes puntos de la provincia, estamos esperando que nos den indicaciones los especialistas", explicó Gonnet. A su vez, la ministra indicó que se tomarán muestras en los peces para saber si efectivamente la mortandad masiva de peces se trató de un proceso de anoxia (falta de oxígeno) o si hubo otro factor que desencadenó el fenómeno.
"Esto lo hacemos, pero no podemos dejar de decir que este es un proceso extraordinario más que atravesamos y a veces estos peces son alimento de otros animales", sugirió. En este sentido, reiteró que "el ministerio está atento a la situación, se hacen los procedimientos y se evalúan los pasos a seguir".
La Laguna Del Plata está ubicada en Vera y Pintado, a unos 200 kilómetros de la ciudad de Santa Fe.