Planta potabilizadora es una obra estratégica para el abastecimiento de agua en el sur de Santa Fe, pero desde hace semanas estaba en estado de suspensión.
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Más de 20 despidos y una obra sin futuro claro
“Hoy nos reincorporamos después de 20 días de suspensión sin goce de sueldo, y ya nos encontramos con un compañero despedido. Nos avisaron que la obra estaba paralizada”, relató Lautaro Loto uno de los voceros de los trabajadores.
Loto explicó que al momento del inicio de los trabajos, eran casi 60 empleados. Con el correr de los meses y la falta de avances, el plantel se redujo hasta quedar apenas 28. Este lunes, al menos 20 de ellos recibieron el telegrama de despido, y el resto aguarda la confirmación legal de su desvinculación.
Obreros de espalda frente a la planta potabilizadora de ASSA.
Obreros de espalda frente a la planta potabilizadora de ASSA.
Audiencia sin respuestas y silencio oficial
Los trabajadores mantuvieron recientemente una audiencia en el Ministerio de Trabajo, pero el Gobierno provincial no se presentó. Aunque hubo versiones de que podría tomar el control de la obra, no hubo avances formales ni compromiso alguno. “No tenemos ninguna respuesta, ni verbal ni por escrito. Legalmente, no hay nada”, afirmó Loto.
El escenario es de total incertidumbre. Sin tareas asignadas ni interlocutores válidos, los obreros decidieron por cuenta propia no continuar con sus actividades, ante la inminencia de los despidos.
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Un proyecto que solo avanzó un 11% en tres años
La obra de la planta potabilizadora comenzó durante la gestión de Alberto Fernández y, según los trabajadores, en tres años solo se avanzó un 11% del total proyectado. “Es muy difícil que esta obra se termine, porque es muy grande y en un país tan inestable...”, lamentó uno de los empleados.
El proyecto fue pensado como una solución estructural para Rosario y su zona metropolitana, pero quedó atrapado en el contexto económico nacional y los recortes en obra pública. Su continuidad es una incógnita.
