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La crisis de los gastronómicos en Santa Fe: cierres, incertidumbre y el problema del delivery

Hace ocho semanas que los bares y restaurantes no pueden abrir sus puertas al público. Solo pueden trabajar por pedido a domicilio. Ya se registraron cierres de locales en la ciudad y la situación del sector es crítica.

La cuarentena por la pandemia de coronavirus continúa y aunque Santa Fe inició la fase de reapertura progresiva y varios rubros como el comercio comenzaron a reactivarse, los bares y restaurantes están lejos de abrir sus puertas para recibir a comensales. Llevan ocho semanas sin actividad en sus locales y solo algunos están trabajando en sus cocinas para llegar a la mesa de los santafesinos por delivery. Otros no tuvieron alternativa y tuvieron que cerrar.

"Estamos en una situación muy crítica, delicada y angustiante. Hoy tenemos caja cero", dijo con preocupación Agustín Macinsky, presidente de la Cámara de Bares de Santa Fe, en diálogo con Aire Digital.

En los últimos días se registró en la ciudad el cierre de algunos bares y restaurantes que lo anunciaron en sus redes sociales. Y muchos otros empresarios hoy piensan en la reconversión de sus estructuras, porque saben que la "nueva normalidad" que llegará al finalizar la cuarentena y de la que hablan los epidemiólogos solo les va a permitir en un futuro una reapertura con protocolos estrictos y con una mínima capacidad de ocupación de mesas.

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Desde el sector hoy muchos sobreviven con el pedido y envío a domicilio, pero las ventas de esta modalidad bajaron en cuarentena. "No se está vendiendo porque la gente en la casa tiene tiempo para cocinarse y hay escasez económica para muchos. Los que están trabajado con sistema de delivery están teniendo pocas ventas", contó Macinsky.

El representante de sector explicó además que hoy esta modalidad de venta se lleva un porcentaje importante de lo único que los locales están vendiendo. "Tenemos una preocupación muy grande porque la venta hoy es por una aplicación de delivery y es abusivo lo cobran que es un 25% del total de las ventas para los que ya lo tenían y de un 30% para los nuevos", explicó.

El representante de más de 90 empresarios locales asociados a esta institución adelantó que aguardan una reunión con la Municipalidad para analizar protocolos posibles para cuando se les permita la reapertura.

Hoy a nivel nacional los bares y restaurantes están inhabilitados para abrir y las autoridades provinciales y locales coinciden en que la gastronomía y la hotelería son los sectores hoy más afectados. Hoy desde el sector piden medidas de ayuda. "Recién este mes tenemos el 50% del salario para empleados desde Nación y no tenemos otra ayuda", reclamó Macinsky.

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