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Santa Fe

Gabriel Sanabria, el policía baleado en Rosario, abrió los ojos y reaccionó a los estímulos de su familia

A casi un mes de recibir diez disparos durante un operativo de control vehicular en Rosario, el suboficial Gabriel Sanabria presentó señales de mejoría en su estado de salud. "Cuando lo vimos despierto no lo podíamos creer", contó su papá.

A 28 días de ser ferozmente baleado el pasado 27 de mayo en un operativo de control vehicular en la ciudad de Rosario, el suboficial de la policía de Santa Fe, Gabriel Sanabria presentó una mejoría en su estado de salud. El policía, oriundo de San Javier, continúa internado en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), pero los médicos se expresaron optimistas por algunos avances en las últimas horas: abrió los ojos y se comunicó mediante señas con su familia.

En el último parte médico, el Dr. Germán Carmiletti indicó que Sanabria "se encuentra alternando episodios donde se le sacan los sedantes para que vaya conectándose con el medio". Si bien el paciente todavía se encuentra conectado a la asistencia respiratoria y con nutrición vía parenteral, los profesionales que lo tratan se refieren a "pasos satisfactorios" en su salud. De todas formas, el médico aclaró que esta mejoría debe ser entendida en el marco del estado de salud de un "paciente crítico o que potencialmente puede tener complicaciones graves".

En diálogo con AIRE, Fabián Sanabria, papá de Gabriel, contó cómo fue el momento en el que pudo volver a comunicarse con su hijo luego de casi un mes de agonía: "Tenía los ojitos abiertos, nos entendía. Cuando lo vimos despierto no lo podíamos creer".

El suboficial permanece internado en la Unidad de Terapia Intensiva y tiene hecha una traqueotomía, razón por la que no puede hablar, pero Fabián indicó que su hijo "está lúcido" y responde a los estímulos de su familia haciendo señas con su cabeza.

"La semana pasada estaba mal Gabriel, pero él seguía con todas sus fuerzas... Ya que se haya despertado es un alivio", dijo su papá en una charla con Geraldine Brezán y Andrea Viñuela durante el programa "7AM".

El agente, de 26 años, recibió en total diez disparos, dos de los cuales impactaron en el chaleco antibalas, mientras que ocho dieron en diferentes partes del cuerpo. Luego de cuatro intervenciones quirúrgicas y 28 días de internación, Gabriel presenta señales de mejoría y aunque su padre explica que es "demasiado pronto para conocer las posibles secuelas", asegura que el policía "sigue luchando, y va evolucionando de a poquito".

El ataque al policía Gabriel Sanabria

El ataque ocurrió el pasado viernes 27 de mayo, pasadas las 2.30 en Arijón al 400, en momentos en que intentó identificar un Peugeot 206. Los ocupantes del auto se negaron a brindar información, sacaron armas largas por una ventanilla y atacaron a balazos al suboficial.

Detención y secuestro de armas

Tras el ataque se implementó un operativo cerrojo que localizó el automóvil que trasladaba a los atacantes abandonado y sin ocupantes en la esquina de Ayacucho y Hungría, a más de diez cuadras de donde se dio el infernal ataque a balazos a Sanabria. En ese coche, los peritos secuestraron 14 vainas servidas, según indicaron fuentes de la pesquisa.

En ese marco, se ingresó a una vivienda, donde fueron detenidos tres hombres y una mujer, dos de los cuales son adolescentes de 16 y 17 años. Secuestraron dos pistolas y dos ametralladoras.