Sin embargo, de acuerdo a una auditoría que lleva adelante el Ministerio de Igualdad y Desarrollo Humano, alrededor del 50% de los auditados tiene irregularidades, es decir, el 25%. La mayoría de ellos son de la ciudad de Rosario y el sur provincial.
De acuerdo a información dada a conocer por el secretario de Desarrollo Territorial provincial, Sergio Basile, la decisión se tomó ante el "desorden” con el que se encontraron al asumir en el Ministerio.
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Tras relevar alrededor de la mitad de los casi 900 comedores y merenderos que existen en Santa Fe, se encontraron con que la mitad de los relevados contaban con irregularidades.
“A algunos les faltaba presentar la rendición de cuentas, encontramos direcciones no declaradas, advertimos lugares inexistentes, como también galpones vacíos. En esos casos, convocamos a las instituciones para que regularicen su situación y cuando lo hacen retomamos la política alimentaria. Si no ocurre lo damos de baja”, aseguró.
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La demanda de ayuda alimentaria "es cada vez más alta" en Santa Fe.
En este sentido, añadió que “los recursos que se están recuperando de espacios o personas que estaban defraudando al Estado se está distribuyendo a aquellas instituciones que tienen mucho compromiso y llegan a lugares muy vulnerables. A ellas sí las acompañamos”.
Basile postuló además que se pudo aumentar las partidas presupuestarias entre un 80 y 100% y que todo ello es parte de los recursos provinciales. “No estamos recibiendo recursos nacionales y toda la asistencia sale de la provincia. Queremos ayudar a los que realmente lo necesita”, concluyó.
Los pedidos de ayuda se incrementan y la demanda "es cada vez más alta" en Santa Fe
Hoy, son 300.000 los santafesinos que reciben asistencia, ya sea en forma directa o través de comedores, merenderos y copas de leche. El funcionario indicó que la demanda de ayuda alimentaria es cada vez más alta en la provincia de Santa Fe.
Basile advirtió que en los últimos meses los pedidos de ayuda alimentaria se incrementaron en un contexto de crisis económico y social en el que el 48,9% de las familias del Gran Santa Fe era pobre y el 15,5%, indigente, según datos del segundo semestre de 2023.
“La cantidad de personas que se ha volcado a los distintos comedores, merenderos y copas de leche es cada vez más importante y desde el Ministerio los asistimos a través de tres programas: la Tarjeta Única Ciudadana, la Tarjeta Institucional (para instituciones) y el Programa Social Nutricional (Prosonu). Todos ellos se sustentan con aportes provinciales”, expresó el funcionario.
En este sentido, Basile indicó que se está haciendo el máximo esfuerzo para sostener la política alimentaria y reconoció la función social de estos espacios que llegan a lugares totalmente vulnerables. “Entendemos que hay que acompañar y estar en el territorio. Vamos a apoyar a los que hacen las cosas bien”, indicó.
