menu
search
Política Elecciones 2023 | Javier Milei | La Libertad Avanza

Javier Milei: un voto multidimensional usado como instrumento de castigo

La composición del electorado de La Libertad Avanza incluye diversas vertientes. El surgimiento mediático y la atracción de liberales desencantados con el macrismo. La incorporación de la identidad bolsonarista. Y la canalización de la bronca por la economía fallida.

Probablemente, el inicio de esta carrera meteórica haya que buscarlo en el transcurso del gobierno de Mauricio Macri, en especial a partir de 2018, cuando se disparó la corrida cambiaria que terminó en la vuelta del Fondo Monetario Internacional (FMI) y luego con la derrota de Cambiemos en las elecciones del año siguiente.

En ese momento de quiebre, Javier Milei comienza a aparecer en televisión. Su histrionismo y sus propuestas liberales extremas rápidamente sumaron rating.

LEER MÁS ► En una elección de tercios, Javier Milei dio el batacazo ante las fuerzas que lo apuntalaron

Según la consultora Ejes de Comunicación, que monitorea medios en Argentina, fue el economista que mayor tiempo estuvo en la pantalla y en la radio en 2018: le hicieron 235 entrevistas y pasó 193.547 segundos al aire. Sus intervenciones se viralizaron hasta el infinito.

Aquel despegue inicial hizo que aterrizara en sus costas un nutrido grupo de militantes liberales, especialmente jóvenes, desencantados con la experiencia macrista. En consecuencia, aquí es posible detectar un primer elemento del voto a Milei: el que adscribe plenamente a su programa económico, el más ideologizado.

A ese factor, casi en paralelo, se le fue sumando el componente típico de las nuevas expresiones de derecha a escala mundial: el rotundo rechazo a los avances en la agenda feminista y LGBTI.

Javier Milei foto Maiquel Torcatt 5.jpg
Desde el regreso al FMI, Javier Milei fue el economista con más pantalla en la televisión argentina.

Desde el regreso al FMI, Javier Milei fue el economista con más pantalla en la televisión argentina.

En el mismo combo ingresaron reivindicaciones al terrorismo de Estado y el enfoque de mano dura como respuesta a la inseguridad. Bolsonarismo a la criolla, entonces, como segundo ingrediente constitutivo del voto a Milei.

Pero quizás haya otra dimensión que explique mayormente lo sucedido el 13 de agosto. En la semana previa a las elecciones, el economista Juan Manuel Telechea publicó en su newsletter Rollover un diagnóstico sobre la evolución de variables sensibles al bolsillo popular.

A valores actuales, Telechea comparó el poder adquisitivo de jubilaciones, salario mínimo, salario privado y asignación universal por hijo, entre otros datos. Y allí se puede verificar que, en 2019, los ingresos reales se habían derrumbado respecto a 2015 y en este año el hundimiento era mayor incluso que al cierre del gobierno de Mauricio Macri.

LEER MÁS ► Cinco datos para entender lo que sucedió en las Paso y pensar en lo que viene

La causa evidente de este deterioro es la inflación, que se multiplicó casi sin pausa durante los últimos ocho años.

Milei se convirtió, así, en un instrumento para castigar a las dos grandes coaliciones. La confirmación de esta hipótesis se encuentra en las cifras irrelevantes de votos en blanco (4,78%) y nulos (1,21%). La feta de salame de otras épocas fue reemplazada esta vez por la boleta del León.