Milei acusó a la ONU de estar integrada por "burócratas internacionales" que, en lugar de "perseguir la paz", buscan "imponer una agenda ideológica a sus miembros".
"Se transformó en un Leviatán de múltiples tentáculos que pretende decidir no solo qué debe hacer cada Estado Nación, sino también cómo deben vivir todos los ciudadanos del mundo", expresó el mandatario.
Milei advirtió que su objetivo es "decirle al mundo lo que va a ocurrir" si las Naciones Unidas "continúa promoviendo las políticas colectivistas de la agenda 2030".
Al iniciar su discurso, el mandatario remarcó que él "no es político" sino un "economista liberal libertario", afirmó que "jamás tuvo la ambición de hacer política" y que fue "honrado con el cargo de presidente frente al fracaso estrepitoso de más de un siglo de políticas colectivistas que destruyeron nuestro país".
Milei hizo una breve alusión al reclamo por la soberanía de las Malvinas, al afirmar: "La ONU tampoco ha cumplido su misión de defender la soberanía territorial de sus integrantes, como sabemos los argentinos en relación con las Islas Malvinas".
También se quejó de la postura de Naciones Unidas ante Israel, al señalar que "en esta misma casa se ha votado sistemáticamente en contra del Estado que es el único país de Medio Oriente que defiende la democracia liberal".
"Quiero hacer una advertencia: estamos ante un fin de ciclo, el colectivismo y el postureo moral de la agenda 'woke' (progresista) han chocado ante la realidad y no tienen soluciones creíbles para ofrecer", sostuvo el mandatario argentino al criticar la Agenda 2030 impulsada por Naciones Unidas.
Al respecto, dijo que la ONU "se transformó en un Leviatán de múltiples tentáculos que pretende decidir no sólo qué debe hacer cada Estado-Nación sino también cómo deben vivir todos los ciudadanos del mundo".