Se trata de Nicolás Agustín Coria y Alberto Mariano Caridad, ambos imputados por el fiscal Estanislao Giavedoni de haber matado a balazos a Copes cuando el muchacho de 24 años se encontraba en la vereda de una heladería de la avenida 7 de marzo de la localidad lindera a la ciudad de Santa Fe.
El homicidio ocurrió el 23 de octubre del 2023 y se dio minutos antes de las seis de la mañana. Aquel día, Copes y un grupo de amigos (tras volver de un boliche de la ciudad de Esperanza) descendieron de un Volkswagen Passat para orinar en la vereda cuando fueron sorprendidos por dos pistoleros que llegaron al lugar a bordo de un Chevrolet Cruz gris.
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Postal de cómo quedó la vereda tras el cruento ataque.
Los gatilleros fueron hasta donde estaba Copes y sin mediar palabra le dispararon hasta dejarlo inmóvil en un charco de sangre para luego escapar de la zona de ataque y abandonar el auto en Luciano Torrent y Seguí. Copes, por su parte, fue trasladado al hospital José María Cullen, en donde agonizó hasta el 5 de octubre, cuando se constató su muerte.
Arrestados y a disposición de la Justicia
A raíz del crimen de Copes, se inició una investigación que tuvo como primer detenido a Caridad, ya que el muchacho fue quien buscó, horas después del homicidio, el Chevrolet Cruze utilizado para ir hacia donde se encontraba la víctima y matarla a balazos en la avenida 7 de Marzo.
Mientras que Coria se entregó cuatro días después ante los detectives de la Sección Homicidios de la entonces Agencia de Investigación Criminal (actualmente Policía de Investigaciones).
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El acusado se entregó junto con su abogado de confianza.
En un principio, fueron acusados de tentativa de homicidio, ya que en el inicio de la causa Copes no había fallecido. Sin embargo, tras constatarse su muerte, los cargos fueron agravados y el caso quedó encuadrado como un homicidio.
Desde entonces, ambos acusados quedaron en prisión preventiva y recientemente, el martes, la Fiscalía solicitó una prórroga de la detención por un año más, la cual fue avalada por el juez Sergio Carraro.
En la audiencia, el fiscal anticipó además que la acusación para que la causa vaya a juicio está a punto de ser presentada. Inclusive, hubo tratativas para acordar un juicio abreviado (ya que el caudal probatorio es amplio) pero la familia de uno de los imputados no aceptó, por lo que el caso deberá ser analizado en un juicio oral y público.