Sauce Viejo: una pareja de pescadores salvó su vida de milagro
Una situación muy complicada vivió Juan, pescador de Sauce Viejo, y su esposa Claudia este martes mientras navegaban en las aguas del río Coronda.
El vecino del barrio Jorge Newbery, se subió como todas las mañanas al bote, y mientras navegaba junto a su esposa, por dos arroyos conocidos como Pascual y Pascualito, a la altura de Bajada España, se desató repentinamente una tormenta y el fuerte viento los arrojó de la embarcación.
"Kunta" (apodo que le dieron por el personaje de la serie Raíces) como lo apodaron al baqueano que vive en la Bajada de Chijí desde hace años, vivió momentos de zozobra aunque con un claro objetivo: salvar la vida de su esposa que no sabe nadar y la propia.
LEER MÁS►Santa Fe prohíbe exportar pescados de sus ríos durante un año
El relato de Juan estremece: "Salíamos del Pascual y del Pascualito (ambos arroyos) cuando de sorpresa se armó la tormenta y me agarró un golpe de viento fuerte. Estábamos a 100 metros de la orilla. Por la misma desesperación busqué en contra pero no puede. Mi mujer estaba desesperada y le pedí que se agarrara de los bidones para que se pueda sostener pero por la correntada y los camalotes, no los pudo agarrar".
La ayuda de un pescador de la zona
En forma minuciosa, Kunta relató en el programa Ahora Vengo por AIRE cómo salvó su vida y la de su esposa y compañera desde hace 41 años. "Me saqué las botas abajo del agua, el buzo, y me puse un pantalón corto que siempre llevo cuando voy a buscar carnada. Salía a flote a respirar y sostenía a mi mujer que me tiraba hacia abajo", dijo muy conmovido.
Kunta estaba perdiendo el conocimiento cuando otro pescador de la zona que llegaba a remo en su bote, los ayudó a llegar a la orilla de Aromos y Estrella Federal, donde se encontraba el personal policial y donde Juan y su esposa viven, en un rancho costero.
LEER MÁS►Buscan a un pescador que se ahogó en un arroyo en San Antonio de Obligado
Juan, que tiene ocho cirugías (la última por la extracción de un tumor en la cabeza), llegó a la orilla y se descompuso. Tras el mal momento, con la voz entrecortada por la emoción dijo: "Me confié, la confianza mata al hombre. La salvé a mi señora porque ella no sabe nadar. Siempre uso bolsas de nylon sobre las medias y las botas más grandes, eso me ayudó. Tuve un Dios aparte, doy gracias a Dios porque salvé a mi mujer", espresó Kunta.
"Sobre llovido mojado"
En plena veda pesquera, a Juan y a su familia, se les hace cuesta arriba llevar un plato a la mesa. Hoy perdieron lo poco que tenían en el río: celular, equipo de mate y embarcación con motor. La canoa no era propia, se la estaba cuidando a un vecino.
"Ahora la voy a tener que pagar, se hace difícil sobre todo porque no se puede pescar por la veda", señaló Juan, preocupado mientras recordaba que hace un año atrás, se tiró al agua para salvarle la vida a un muchacho que se estaba ahogando.
Juan tiene 58 años y junto a Claudia, tuvieron cinco hijas mujeres y 18 nietos. Tras el milagro, celebra seguir en la lucha a la par de su compañera de vida.
