Un delincuente trepó hasta el departamento, en un cuarto piso, donde viven un agente de Prefectura y su esposa, en pleno macrocentro de la ciudad de Santa Fe. Fue este viernes por la mañana y el ladrón robó la billetera del agente de la fuerza federal de seguridad. Mientras la pareja dormía, alrededor de las 4.30, el ladrón subió por los balcones y logró ingresar a la vivienda. Cuando se disponía a tomar elementos de valor, la dueña de casa se despertó junto a su pareja. Ante los gritos de ambos, el delincuente sólo pudo tomar la billetera del prefecto y se dio a la fuga. En contacto con la prensa, la víctima del robo relató que “cuando gritamos con mi esposo, el delincuente se tiró por el balcón directamente a la calle”. Fue en Irigoyen Freyre al 2200.
En contacto con la prensa, la víctima del robo relató que “cuando gritamos con mi esposo, el delincuente se tiró por el balcón directamente a la calle”. Fue en Irigoyen Freyre al 2200.
En la billetera estaba el DNI personal, tarjetas varias, dinero en efectivo y la credencial de Prefectura Naval. Según información policial, existe un poste que llega desde la vereda hasta los balcones del edificio y el delincuente habría utilizado para escalar.
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El ladrón muerto en el ingreso al edificio de calle Suipacha era el "Hombre Araña"
Leonardo Gabriel Gómez, encontrado muerto durante la madrugada del 23 de julio de 2022, en el ingreso a un edificio de Suipacha al 2900, contaba con un historial de condenas por haber asolado departamentos del centro de Santa Fe, hechos por los cuales se ganó la fama de ser el “Hombre Araña” santafesino. Su modus operandi fue siempre el mismo. Escalaba los edificios, se trepaba audazmente de los balcones y luego sustraía elementos de domicilios particulares. ¿Tenía superpoderes?, claramente no, sin embargo, su astucia criminal lo llevó a subirse a edificaciones de importantes alturas en reiteradas oportunidades.
Este sábado, murió en su ley, luego de haber intentado trepar un edificio -sospechan investigadores- y caer al vacío y golpear su cabeza contra una maceta que estaba colocada sobre un tapial.
El historial delictivo del “Hombre Araña” se retrotrae a por lo menos seis años atrás cuando fue detenido en distintos procedimientos policiales que tuvieron lugar en el micro y macrocentro santafesino y los cuales supieron ser tramitados ante la Justicia por la fiscal Milagros Parodi. El primero ocurrió el 6 de mayo del 2016, cuando Gómez, a las 14.15 escaló la reja de un edificio ubicado en Crespo al 3000 y de un departamento sustrajo una mochila que tenía una computadora laptop. La situación fue advertida por el dueño de casa que al ver al “hombre araña” comenzó a correrlo por lo que terminó reteniéndolo, junto con personal policial, en 1° de mayo e Hipólito Irigoyen.
Un mes después, el 11 de julio del 2016, Gómez protagonizó un segundo hecho cuando trepó los muros de un departamento de 1° de Mayo al 3000 e ingresó a un domicilio y se llevó una campera y una mochila con una notebook. Sin embargo, el escape terminó frustrándose luego de ser atrapado por personal policial apenas puso un pie en la calle.
El 15 de agosto de ese mismo año, a las 2.20, Gómez intentó subirse al balcón de un edificio de Juan de Garay al 2600, pero el robo terminó frustrándose porque el propietario lo sorprendió y le arrojó un balde con agua cuando el ladrón tenía sus pies sobre la baranda del balcón y sus manos sobre el techo del piso superior.
Meses después, el 8 de marzo del 2018, también en horas de la madrugada, el hombre araña ingresó a una casa ubicada en Reynares y Teniente Loza, en zona norte, y sorprendió a la propietaria a la cual amenazó y le sacó zapatillas y un celular para luego huir. Cinco meses después, el 17 de agosto de ese año -pasadas las 3- Gómez volvió a quedar implicado en otro asalto luego de entrar a un edificio de Cándido Pujato al 3000 y se robó 200 pesos, una cámara digital y dos pares de zapatillas. Un día después, a las 2.40, volvió a escalar un edificio de 25 de Mayo al 3500, pero tras el aviso al 911 fue arrestado por personal policial.
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Puesto a disposición de la Justicia, Gómez fue luego condenado a tres años de prisión condicional luego de aceptar su responsabilidad en los hechos cometidos durante el raid criminal cometido entre 2016 y 2017. Sin embargo, su ambición delictiva siempre quiso más.
La antesala de lo que sería su muerte
El 27 de enero del 2018, ya condenado, Gómez volvió a delinquir, pero sufrió un traspié tras intentar robar una bicicleta de un edificio de Urquiza, entre Juan de Garay y Lisandro de la Torre. En esa oportunidad, se trepó hasta un departamento, sacó una bicicleta y una notebook, sin embargo, cuando intentó pasar de un balcón a otro perdió el equilibrio y cayó a la vereda por lo que sufrió múltiples lesiones.
Tras la intervención policial, el muchacho -de 28 años en ese entonces- fue trasladado al hospital José María Cullen en donde los médicos le diagnosticaron fractura en su pierna derecha. En el nosocomio permaneció varios días hasta que fue dado de alta y trasladado a tribunales para ser imputado por el nuevo e insólito intento de robo.
Aquel episodio fue el último que tuvo a Gómez como protagonista de una secuencia criminal.
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