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Policiales

Policías baleados son custodiados por Gendarmería: les habrían hallado droga

Dos policías que pertenecen a la Dirección Provincial de Seguridad Vial de Santa Fe fueron baleados por delincuentes mientras realizaban esta madrugada un control vehicular de rutina en la intersección de la autovía nacional 19 y la ruta 13, en cercanías a la localidad de Plaza Clucellas.

Los agentes, el oficial Matías Cuevas (29) y el suboficial Matías López (25), detuvieron la marcha de un automóvil marca Toyota Corolla, de antiguo modelo, que circulaba en dirección oeste-este, en el que se conducían los sujetos.

Según la versión policial, estos últimos descendieron y comenzaron a intercambiar disparos con los policías, quienes resultaron heridos. No conformes con ello, los delincuentes robaron el patrullero, una camioneta marca Volkswagen Amarok, y huyeron hacia barrio Acapulco (Josefina) donde la prendieron fuego, a la altura de las calles 1 y 24.

Los policías fueron trasladados con urgencia al Hospital Iturraspe, en donde quedaron internados en la Unidad de Terapia Intensiva.

López presentaba un disparo de arma de fuego a altura del abdomen y había sido intervenido quirúrgicamente siendo su estado reservado. Cuevas, por su parte, fue herido en el rostro afectando el ojo izquierdo.

Desde el Departamento de Relaciones Policiales de Santa Fe, el oficial Cristian Ferreyra, informó que el Toyota Corolla podría haber sido sustraído anteriormente en Frontera y que el mismo quedó abandonado en el lugar en donde se produjo el tiroteo con los policías.

Tras este último episodio, el sistema de rastreo satelital con el que estaba equipado el patrullero indicó el lugar exacto en donde los delincuentes abandonaron la unidad, la cual apareció totalmente incinerada.

Una de las primeras versiones extraoficiales indicaba que se habría registrado un forcejeo entre los sujetos y los policías y que uno de ellos le quitó el arma reglamentaria y con la misma efectuó los disparos. Además se apoderaron de una escopeta semiautomática 12/70 y dos chalecos antibalas.

Este nuevo hecho de sangre que involucra a barrio Acapulco se suma a los enfrentamientos entre bandas antagónicas que se disputan el negocio del narcomenudeo y que en las últimas semanas dejaron varios heridos y un barrio hostigado por violencia.

Pasado el mediodía de de hoy, una versión extraoficial indicaba que a los efectivos heridos se les habrían hallado droga en su poder. Por este motivo, al centro de salud fue convocada Gendarmería Nacional para custodiarlos tras la orden del juez federal de Primera Instancia de Rafaela, Miguel Abasolo.

Si bien el hermetismo es absoluto en cuanto a la causa de la custodia, la versión que fue tomando fuerza con el correr de las horas indicaría que habrían hallado en poder de los uniformados marihuana y cocaína, aunque no se especificó su cantidad.

Fuente: www.lavozdesanjusto.com

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