La gran nevada que cae en Madrid y su región desde hace tres días, la más importante de los últimos 60 años, dejó intransitables calles y rutas, miles de personas atrapadas en sus autos, el transporte urbano terrestre y el ferroviario suspendidos, y el aeropuerto paralizado el sábado.
Más de 1.500 vehículos quedaron atrapados en Madrid, la mayoría en las carreteras de circunvalación de la ciudad y en la autopista que va hacia las regiones de Castilla, La Mancha y Andalucía, en el sur del país, según informó Carlos Novillo, director de la agencia de emergencias de Madrid.
Las imágenes que dejó la fuerte nevada, que este domingo continúa en Madrid, son impensadas. Se trata del temporal de frío llamado Filomena, que afecta principalmente al centro y este de España.
El Ejército y los servicios de emergencia rescataron ya a unos 1.000 conductores en las rutas madrileñas. Los vehículos quedaron atrapados en hileras kilométricas en varias autopistas de circunvalación y otras adyacentes, ya que las máquinas quitanieves no pudieron despejar las vías.
El aeropuerto de Madrid Barajas Adolfo Suárez paralizó sus operaciones durante todo este sábado.
Por fortuna, la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) anunció el fin de la alerta roja por fuertes nevadas en la Comunidad de Madrid, y da paso a la entrada de la alerta naranja, según informó TeleMadrid.
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