Más de 82 millones de estadounidenses emitieron ya su voto anticipado, una cifra récord que anticipa una participación histórica, mientras el presidente y candidato a la reelección, Donald Trump, y su rival, el exvicepresidente Joe Biden, hacen un último esfuerzo para ganar voluntades en los estados pendulares que podrían definir la elección del 3 de noviembre.
Elecciones en Estados Unidos: el voto anticipado es récord y los candidatos hacen su último esfuerzo
La elección de este año en Estados Unidos generó un particular interés en los votantes que además buscan evitar aglomeraciones por la pandemia de coronavirus. Por esto, ya votaron más de 80 millones de ciudadanos. Trump y Biden se juegan las últimas cartas en estados claves. Florida puede definir la elección.
Según un conteo difundido por el grupo de monitoreo US Elections Project, más de 82 millones de personas votaron de forma anticipada frente al total de 47 millones que lo hicieron hace cuatro años en el periodo inmediatamente anterior a la jornada electoral.
Esta mayor asistencia preliminar refleja el enorme interés que este proceso electoral suscita entre la población y el llamado a sufragar por correo para evitar las aglomeraciones ante la pandemia de coronavirus.
Últimos esfuerzos
A cuatro días de los comicios, Trump tiene en agenda actos en Michigan y Wisconsin, dos estados en los que ganó ajustadamente a Hillary Clinton en 2016 y que no puede perder este año si quiere lograr la reelección.
Por su parte, su rival demócrata, Joe Biden, comparecerá en Iowa y Minnesota y Wisconsin, también estados que regularmente vieron contiendas cerradas durante las últimas campañas presidenciales.
Como el jueves en Florida, un estado clave, ambos candidatos coincidirán en algunos estados a cuatro días de que los estadounidenses decidan cual de ellos entrará en la Casa Blanca en enero.
Los ciudadanos de Florida pudieron ver el jueves sus diferentes estilos y estrategias.
Florida, donde el voto latino -tanto el conservador anclado en la comunidad cubano-estadounidense como el más liberal de los puertorriqueños- suele jugar un rol central, no es el único distrito clave del país, pero sí es considerado por estrategas de ambos partidos como un requisito para ganar.
Ambos candidatos están cabeza a cabeza en las encuestas en Florida que tiene en juego 29 de los 270 votos necesarios en el Colegio Electoral para llegar a la Casa Blanca.