La gazania es una de las plantas más resistentes del verano. Originaria de zonas cálidas y secas, soporta con facilidad el sol intenso y las altas temperaturas, y además requiere muy poca agua.
La planta que transforma cualquier espacio con sus flores brillantes
Las flores de la gazania —similares a margaritas gigantes— vienen en tonos amarillos, naranjas, rosados y bicolores, y se abren solo cuando reciben luz, lo que genera un efecto especial durante los días despejados.
Perfecta para jardines secos, canteros con pleno sol o balcones que reciben calor directo, la gazania prospera donde muchas plantas se queman o se marchitan. Es ideal para principiantes porque prácticamente se cuida sola.
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Es una de las plantas más recomendadas para jardines secos, balcones soleados y macetas pequeñas.
Una aliada para jardines de bajo mantenimiento
Uno de sus puntos fuertes es su capacidad de crecer en suelos pobres, arenosos o pedregosos, algo que muchas plantas de flor no toleran. Además:
Florece desde la primavera hasta mediados del otoño.
También funciona muy bien en macetas pequeñas o jardineras, donde forma matas compactas que se cubren de flores día tras día.
Cómo lograr que luzca aún más
Para que florezca al máximo, conviene ubicarla en un sector de sol pleno donde reciba luz directa la mayor parte del día. Si se plantan varias juntas, se logra un “tapiz” de color muy vistoso que crece de forma pareja y requiere apenas algunos cuidados básicos, como retirar flores secas y evitar encharcamientos.