La Zamioculca es una de las plantas más duraderas y adaptables para interiores. Su regreso como protagonista en decoración no es casual: soporta descuidos, ambientes poco luminosos y largos períodos sin agua, algo ideal para quienes no tienen tiempo o experiencia.
Su apariencia elegante y brillante la convierte en un clásico moderno para livings, pasillos, oficinas y dormitorios.
La planta “indestructible” que volvió a ser tendencia en los hogares
Los expertos en jardinería destacan su enorme capacidad de supervivencia:
Tolera luz baja y artificial.
Requiere muy poco riego.
No necesita fertilización frecuente.
Se adapta a cambios de temperatura.
Sus raíces almacenan agua, por lo que no se marchita fácilmente.
Por esto, se convirtió en la candidata perfecta para principiantes o personas con agenda ajustada.