El ex One Direction murió sin dejar testamento y su fortuna, valuada en 32 millones de dólares, deberá atravesar un complejo proceso de sucesión.
Liam Payne dejó una fortuna de 32 millones de dólares sin un testamento claro.
Liam Payne, exintegrante de One Direction, murió en 2024 en Buenos Aires a los 31 años y dejó una fortuna de 32 millones de dólares sin dejar un testamento. Documentos judiciales revelaron que Cheryl Tweedy, su expareja y madre de su hijo Bear, asumió la administración del patrimonio.
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Tweedy, de 41 años, mantuvo una relación con Payne entre 2016 y 2018. Aunque la pareja se separó hace años, la ley británica la designó como responsable legal para gestionar los bienes del músico. El proceso de sucesión promete ser complejo por la falta de disposiciones escritas.
Según las normas del Reino Unido, cuando no existe un testamento, la herencia se transfiere al cónyuge o a los familiares más cercanos. Por ese motivo, se espera que la fortuna se coloque en un fideicomiso a nombre de Bear, el único hijo de Payne.
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Esta decisión dejó fuera a Kate Cassidy, pareja de Payne al momento de su muerte. La joven, con quien el cantante convivía en una casa en Wellington, Florida, había manifestado públicamente su intención de casarse con él.
Incluso mostró una nota escrita por Payne, en la que expresaba su deseo de pedirle matrimonio y pasar el resto de su vida con ella.
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