El bebé, que había nacido de manera prematura, recibió el alta médica tras tres semanas de internación en neonatología y pasó la Nochebuena en su casa junto a la actriz.
La Navidad trajo alivio y emoción para Rocío Marengo y su familia. La actriz y modelo se retiró del Sanatorio Otamendi con su hijo recién nacido, Isidro, en brazos, luego de varias semanas de internación en el área de neonatología.
La noticia generó alegría entre sus seguidores, que acompañaron de cerca la evolución del pequeño, fruto de la relación entre Marengo y el empresario Eduardo Fort, hermano de Ricardo Fort. A través de sus redes sociales, la artista compartió imágenes y videos del momento en que dejó el centro de salud junto al bebé.
LEER MÁS ► Mientras Christian Petersen sigue internado, su hijo realizó un extraño posteo en Instagram
“Bebito, vamos a casa”, escribió Marengo en una historia de Instagram, donde mostró parte del recorrido final por el sanatorio. En otro posteo, expresó su emoción por el alta médica: “Mi amorcito, llegó el día. Hoy nos vamos a casa”.
Durante los días previos, la actriz agradeció de manera reiterada al personal médico que atendió a Isidro durante su internación. El bebé permaneció tres semanas bajo observación médica tras su nacimiento prematuro.
Isidro nació el 3 de diciembre de 2025, a las 34 semanas de gestación, mediante una cesárea de urgencia a raíz de un desprendimiento de placenta. La situación obligó a su internación para estabilizar sus parámetros corporales. Finalmente, este miércoles 24 de diciembre, los médicos autorizaron el alta y el regreso a casa en la previa de la Nochebuena.
Temas
