En el mundo de las parejas de celebridades, a menudo nos encontramos con uniones sorprendentes y, en ocasiones, efímeras. Tal es el caso de Viviana Canosa y Alejandro Borensztein, quienes, contra todo pronóstico, formaron una de las parejas más inesperadas del espectáculo argentino. Juntos, trajeron al mundo a su pequeña hija Martina, un fruto de su amor que ahora será el lazo indestructible que los unirá a pesar de la separación.
Sin embargo, como en cualquier relación, el amor no siempre dura para siempre. En 2019, decidieron separarse tras ocho años juntos. Tiempo después, en distintas entrevistas, revelaron cuáles fueron los motivos que los llevaron a tomar caminos separados.
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"Cuando uno tiene un hijo, tiene que ser su mejor versión. Y cuando estás triste y las cosas no fluyen como te gustaría, tienes que tomar una decisión. Cuando dije la palabra 'divorcio', tragué y pensé 'no lo puedo creer'. Fue un proceso muy largo, especialmente para mí", dijo sin rodeos Canosa, reflejando la dificultad de esa elección.
Por su parte, Alejandro Borensztein expresó: "Después de pensarlo mucho tiempo, tomé la decisión. No quiere decir que no haya amor, eso no se va de un día para otro. Tal vez no es lo mismo el amor que estar enamorado. El amor va a estar por siempre, por Martina". Sus palabras demuestran que, a pesar de la separación, el cariño y el respeto mutuo persisten.
En cuanto a los motivos concretos que llevaron a la ruptura, Viviana Canosa detalló: "Faltaban cosas que a mí básicamente no me terminaban de cerrar. Fue un proceso muy interno. Pero un día cae la ficha y se toma la decisión. Hasta que no firmas el último papel, no lo puedes creer. Uno arma una familia para toda la vida. Nunca piensas que se va a terminar". Estas palabras reflejan la reflexión profunda y la complejidad emocional que atravesaron ambos antes de tomar la determinación final.
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La conductora también compartió cómo fue el momento de comunicar la noticia a Martina: "Cuando se lo conté a Martina, nos aliviamos los dos. Era una decisión que había que tomar y no lo contamos en público de común acuerdo con Ale porque los dos queríamos estar más tranquilos. Nadie se divorcia de un día para el otro. Me casé en secreto. ¿Por qué iban a tener que saber ahora que me divorcié?". Estas palabras revelan el enfoque responsable que han tenido en relación a su hija y cómo han intentado protegerla durante este proceso difícil.
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