Iván de Pineda habló sobre su presente en Escape perfecto, su pasión por la televisión y los desafíos que marcaron su carrera, desde las pasarelas hasta el prime time.
El modelo y conductor celebra el presente con "Escape perfecto", mientras mantiene su esencia curiosa y multifacética que lo llevó a brillar en las pasarelas y la pantalla.
Iván de Pineda es un ícono de elegancia y versatilidad. Reconocido internacionalmente como modelo y ahora consagrado como conductor de televisión, compartió detalles inéditos de su vida y su carrera en una charla con Revista GENTE.
Durante la entrevista, reflexionó sobre su actualidad al frente de Escape perfecto, el ciclo de Telefe que esta semana estrenó una nueva edición con premios de hasta 90 millones de pesos. "Me considero un ñoño, un nerd de toda la vida", confesó.
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En su diálogo, Iván recordó sus comienzos como supermodelo, trabajando para marcas icónicas como Versace, Dior y L'Uomo Vogue. Pero destacó que fue su curiosidad lo que lo llevó a expandir sus horizontes hacia la televisión. "Hacer un programa de viajes o uno de preguntas y respuestas tiene mucho que ver con cómo soy. Todos los trabajos que hice parten de mi curiosidad", explicó.
Ahora, su éxito lo encuentra liderando Escape perfecto, un formato que combina entretenimiento y emociones. "Venir a un programa es como una excursión: queremos que sea lo mejor, y si alguien se lleva un premio, mejor aún", comentó sobre el ciclo, que se ha consolidado como líder en el horario central de Telefe.
Durante la entrevista, Iván resaltó que su objetivo como conductor es conectar genuinamente con las personas. "Me encanta empatizar con los participantes y el público. Aprendo algo nuevo todos los días, y eso me enriquece", compartió.
El programa, que también cuenta con ediciones especiales con famosos, le permite desafiarse a diario. "La alegría que tengo al hacer Escape perfecto es espectacular. Es un espacio para disfrutar y también para soñar", reflexionó.
Aunque su presente está enfocado en el entretenimiento, Iván reconoció que aún lo persiguen preguntas sobre su etapa como conductor de Resto del Mundo, el programa que lo llevó a recorrer los rincones más remotos del planeta durante una década. "La gente me pregunta en la calle si voy a volver. Viajar me genera sueños infinitos, pero siento que todo lo que hago forma parte de un todo; no puedo elegir entre una cosa y otra", explicó.
En su charla, Iván reveló aspectos poco conocidos de su historia:
A sus 45 años, Iván de Pineda continúa combinando su talento, carisma y curiosidad para reinventarse. Desde las pasarelas más prestigiosas hasta los estudios de televisión, su capacidad de conectar con el público lo convierte en una figura única.
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