Gracias a la prueba del “Congelados” en Gran Hermano, Agostina Spinelli pudo reencontrarse con su hija adolescente de 16 años, Morena. El momento protagonizado por ambas, emocionó a todos los participantes y televidentes.
Tras cruzar la puerta, la menor fue directamente hacia su madre y la abrazó. “Quiero que sepas que estoy muy bien. No te das una idea de lo feliz que estoy por vos. Me llenás el corazón de orgullo de una manera que no te podés imaginar. Te admiro de una manera increíble porque sos la mejor del mundo”, aseguró la joven.
Al escuchar las palabras, la policía no podía dejar de llorar. “Yo sé que soy fría con vos muchas veces, pero al tenerte tan lejos me hace querer decirte todas estas cosas que nunca te dije”, reveló Morena.
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La joven no solo le habló a su madre, sino que también a los demás hermanitos: “Ojalá todos pudieran ver lo increíble que es esta mujer como mamá porque es una parte de ella que todavía no conocen”. Y continuó con las palabras de aliento: “Te admiro. Cuando crezca, anhelo ser como vos. Sos la mejor del mundo”. Para despedirse, Morena mencionó que estaba muy feliz de verla y le agradeció a Gran Hermano.
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Un minuto después de la partida de la adolescente, Agostina rompió en llanto. “No lo puedo creer, no la pude abrazar. No la esperaba y entró con una actitud increíble. Aparte me miraba a los ojos… Ella es re vergonzosa, pero estaba tranquila”, señaló la participante.
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