"Esas horas las viví mal. Estaba muy contento por los jugadores. Me gustó mucho el equipo, Machuca la rompió toda. Pero la pasé muy mal. El llamado de Christian Basedas me hace salir corriendo, me dijo que me necesitaban. Yo me fui a Vélez sin saber cuánto iba a cobrar", contó el entrenador en una entrevista con Juan Pablo Varsky.
"Ya me habían llamado cuando estaba en Tijuana, pero no pude salir. Era la primera vez que Vélez me llamaba", reconoció el Gallego, quien se encuentra sin trabajo luego de su salida de Vélez Sársfield.
En la misma línea, Méndez aseguró entender el enojo de los futbolistas del Tatengue por su decisión de marcharse en un momento tan crucial de la temporada. "Los chicos de Unión se levantaron, hay muy buenos jugadores en el club y saca muchos. Vos te vas y dejás un trabajo atrás que costó. El jugador tiene el derecho de sentirse abandonado. No me arrepiento, hice lo que entendía que tenía que hacer", expresó.
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Sebastián Méndez recordó su paso por el Club Atlético Unión: "Lo que hice está mal".
Asimismo, reconoció: "Me manejé mal. No le dije nunca a los jugadores que me iba. No podía. En otro momento de mi vida, no sé si hubiese hecho eso".
Sebastián Méndez: "Entiendo que los jugadores no me hayan saludado"
"Los jugadores me lo reprocharon, después del partido con Vélez hablé con Claudio Corvalán. Entiendo que no me hayan saludado, eso es lo que más me dolió. Habíamos hecho algo bueno, y encima me fui en el mejor partido de nuestra era, contra Independiente", contó Méndez.
Por otra parte, reveló cómo fue el momento en que le comunicó a los futbolistas de Unión que no continuaría en el club, aunque no les informó de su arreglo con Vélez: "Tuve una reunión y les dije 'me voy a Buenos Aires', pero no podía decirles que me iba a Vélez. Me dolió no haberles podido decir que me iba a Vélez, decirles la verdad", manifestó el DT.
Una decisión "imposible"
Sebastián Méndez aseguró que “era imposible decirle que no al club que te formó y que te necesita, pero no como jugador", y que, aunque no está feliz con lo que hizo en Unión, "uno no puede pedir perdón toda la vida".
"Entiendo que el día que vaya a Santa Fe me van a putear de todas las formas posibles. También es verdad que llegamos a la última fecha y jugamos contra Colón. Y nos terminamos salvando nosotros y Unión. Yo soy creyente, la vida te pone estas situaciones", reflexionó el exentrenador de Unión.
