El ingreso de Venus en el signo de Cáncer es uno de los eventos astrológicos más importantes de la semana y la energía que pondrá en juego durante esta etapa será la de una profunda conexión con nuestras emociones.
Este domingo Venus ingresó en Cáncer, un signo de agua.
Venus es el planeta del amor, de las relaciones, y también nos enseña a auto-valorarnos, a entender el deseo desde el placer. Es el regente de Tauro y Libra y despliega una energía femenina muy potente, ya que en la mitología griega representa a Afrodita, diosa de la belleza y la sensualidad.
Por su parte, Cáncer es un signo de agua regido por la luna, y está asociado al elemento agua. Este signo cardinal representa un mundo emocional muy perceptivo y receptivo, reservado y cálido. La energía de Cáncer es la del clan, la manada, la que contiene y protege a los suyos, la que cuida de la familia y el hogar. En líneas generales, Cáncer es la base emocional de nuestra vida, y eso viene a despertar Venus ahora.
Venus viene a mover el agua, a recordarnos que sentir es urgente, que el corazón se debilita si no ama, y que ese amor me conecta con mi centro, con mi raíz. Aprender el valor de nuestras emociones puede ser un enorme desafío, sobre todo cuando corremos detrás de las obligaciones, del trabajo, de las exigencias, quitándole calidad de tiempo a la familia, a los que nos sostienen cuando las cosas se ponen feas.
Sentirnos y mostrarnos vulnerables es también un acto de fortaleza, un reconocimiento de mi propia sensibilidad y humanidad. Esa experiencia trae Venus, potenciando todo el movimiento emocional que nos dejó el eclipse lunar en Escorpio.
Venus en Cáncer y los cinco signos más impactados
Si bien todos los signos del zodíaco son permeables a estas vibraciones de Venus en Cáncer, cinco de ellos podrán conectar mejor quizás con esta energía.
Son los cuatro signos cardinales: Cáncer, Capricornio, Aries y Libra. A ellos se suma también Tauro, por ser otro de los signos regidos por Venus.
A algunos de estos signos les costará un poco más conectar con sus emociones, así que probablemente les demande un esfuerzo. Pero es necesario dejar que fluyan los miedos, las angustias, el amor, la ternura, la alegría, buscando actividades que los ayuden a movilizarlas.
Ver una película, escuchar una vieja canción, salir a pasear en familia, son cosas que seguramente los ayudará a fluir en sintonía con el corazón.
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