El cura acusado por abusos contra menores de edad, Eduardo Lorenzo ,se suicidó este lunes en una pensión de Cáritas ante su inminente detención. La Iglesia platense le organizó el último homenaje en la misma parroquia en donde, según consta en la causa judicial, cometió sus delitos.
A las 9.30 de la mañana, el propio arzobispo de la Plata, Víctor Fernández, comenzó a oficiar la ceremonia en la parroquia de la Inmaculada Madre de Dios, de Gonnet , el mismo lugar al que poco después arribó el ataúd con los restos del cura. Entre otros cuestiones, Lorenzo fue confesor del condenado Julio César Grassi.
El día lunes se conoció el informe de los peritos donde se detallan los rasgos distinto de la personalidad de Lorenzo: perverso y narcisista. En esas líneas que dejan al descubierto al aberrante accionar del presunto abusador se detalló el modus operandi que utilizaba, "que se hacía untar su miembro viril con mermelada de rosa mosqueta como paso previo a acceder carnalmente a sus víctimas”.
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