De acuerdo con el informe forense, Daiana Da Rosa recibió tres disparos: uno en la clavícula, otro en la cabeza y un tercero superficial. El patrón de los impactos indicaría que el último fue un tiro de remate, lo que contradice la versión que Comes había expresado durante su atrincheramiento.
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El estudio determinó que los disparos provenían del arma de la víctima, mientras que Comes había llegado desarmado a la vivienda donde ocurrió el crimen, el domingo 26 de octubre.
El mensaje antes del suicidio
Tras el ataque, el agresor envió un video y un mensaje a un grupo de WhatsApp de sus compañeros de la fuerza:
“Lamento mucho lo que hice. Son un excelente grupo, una excelente compañía. Estoy arrepentido, pero ya es tarde. Yo sé lo que me espera.”
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Cuando los efectivos llegaron al lugar, encontraron ambos cuerpos: Da Rosa ya había muerto, mientras que Comes fue trasladado al hospital, donde falleció horas después.