Los últimos diez años fueron los más calientes jamás registrados en el planeta. Así lo advierte un informe de la NASA, que asegura que en el 2023, la temperatura promedio de la superficie de la Tierra fue la más cálida desde que se tienen registros.
La científica de la NASA, Erika Podest, advirtió que el pico de El Niño aún no llegó. El 2023 fue el año más caliente desde que se tienen registros y se espera que las temperaturas sigan aumentando.
En diálogo con AIRE, la científica del clima del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA, Erika Podest, aseguró que "realmente, el 2023, fue un año fuera de lo normal" en donde se vieron diferentes impactos ambientales: inundaciones, sequías intensas e incendios forestales.
Desde los Estados Unidos, en donde la NASA hizo sus registros, hasta la Argentina y otros puntos del mundo, las consecuencias del aumento de la temperatura del planeta se hicieron notar.
"No son cosas que afectan nada más a una localidad, sino que pueden afectar más allá de las fronteras", aseguró la científica. Por ejemplo, los incendios en Canadá contaminaron la calidad del aire en Nueva York (EE.UU.). En Argentina, los significativos incendios forestales en distintas provincias atenuaron la visibilidad de paisajes en Santa Fe y otras localidades.
Pero, tras tan prolongada sequía, el 2023 trajo un cambio tajante al clima en la región: llegó el fenómeno de El Niño. "En algunas partes El Niño trae sequías y, en otras, trae inundaciones. Además, los años en los que ocurre El Niño tienden a ser un poco más calientes", advirtió Podest en AIRE.
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Fenómeno del Niño: ¿qué podemos esperar en Santa Fe?
La científica de la NASA explicó que El Niño "es un fenómeno natural que ocurre cíclicamente, cada tres a siete años más o menos". Se trata de un calentamiento ecuatorial, en las aguas, que afecta a la temperatura del aire, a las corrientes aéreas.
Hasta ahora, El Niño llegó a Santa Fe con precipitaciones. Pero la experta señaló que "usualmente, cuando ocurre El Niño, las temperaturas a nivel global incrementan, por lo que esos años tienden a ser un poco más calientes".
"Lo interesante es que no hemos llegado al pico del Niño. El pico se estima que ocurra en febrero o marzo de este año. Así que esa es, más o menos, la preocupación, de que ya hemos visto impactos tan fuertes en el 2023 y todavía no ha ocurrido el pico, lo peor", alertó Podest.
Y remató: "Se espera que el 2024 también traiga fenómenos e impactos fuera de lo normal".
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Si bien el año de El Niño es usualmente un poco más caliente que otros, esto "no significa que en el futuro las cosas se normalicen", dijo la científica de la NASA. "Si uno ve la tendencia en la temperatura promedio a nivel global, está incrementando y va a seguir incrementando", agregó.
"Estos impactos que hemos estado viendo, como los ocurridos en la provincia de Santa Fe, que es una provincia con una concentración agro ganadera muy fuerte dentro del país, que se vio afectada por los cambios en las precipitaciones, antes eran cosas raras, fuera de lo normal. Una inundación ocurría cada 50 o 100 años, o cada 500 años algo extremo. Esas cosas ahora se están viendo más a menudo. Y en el futuro corto se espera ver más de estos impactos", le aseguró Podest a AIRE.
Finalmente, la experta remarcó que las ciudades fueron diseñadas para otro clima y que, en adelante, "tendrá que haber no solo una adaptación, sino un nuevo diseño de las estructuras que tenemos".
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