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Salud cerebro | Alzheimer |

¿Cuál es la diferencia entre Alzheimer, demencia senil y arterioesclerosis?

El médico neurólogo y máster en Neurociencias, Hugo Valderrama, explicó cuáles son las diferencia entre la demencia senil, el Alzheimer y la arterioesclerosis.

Lo primero y básico necesario de aclarar: las demencias no son “normales” en las personas mayores. Si bien es cierto, que aumentan los porcentajes de estas patologías, a medida que aumenta la edad, también están los porcentajes de personas mayores con un cerebro saludable y activo.

Las demencias son enfermedades, donde van muriendo neuronas progresivamente. La enfermedad de Alzheimer es la más frecuente, pero existen otras, como la demencia vascular. Se diferencian entre sí, principalmente por las redes neuronales que afectan y, por lo tanto, qué síntomas producen.

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"Las personas por lo general tienen miedo que la base sea exclusivamente genética, cuando en realidad es lo menos frecuente", destacó el especialista.

Somos cerebro y pueden llegar a dañarse cualquiera de sus funciones. Funciones mentales (memoria, razonamiento, orientación, lenguaje, etc), conducta y emociones, coordinación de nuestros músculos e inclusive, nuestro sistema de defensa (inmunidad).

El origen es multifactorial. Esto significa que hay múltiples y distintos procesos, que llegan a producir daño en el cerebro. Muchos dilucidados, otros en procesos de investigación.

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La genética está involucrada, pero no es un factor determinante (excepto en casos excepcionales), sino que es un factor de riesgo más. Como también lo son, la falta de contacto social, actividades y objetivos saludables, el sedentarismo, trastornos del sueño, trastornos psiquiátricos crónicos, tabaco, hipertensión arterial crónica, colesterol elevado y diabetes.

Los últimos cuatro factores nombrados, incrementan la llamada “arterioesclerosis”. Significa “rigidez” de las arterias, esta en relación con la mayoría de las demencias y es clave en la vascular.

Solía agregarse el término “senil” luego de demencia, porque se la relacionaba exclusivamente con grupos etarios avanzados. Sin embargo a pesar de ser infrecuentes, existen casos en personas adultas jóvenes. Por ello, este término dejó de aplicarse.

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