Se realizó el tercer paro general contra Milei: la CGT lo calificó de "éxito rotundo" y cuestionó al Gobierno

En una conferencia de prensa en la sede de Azopardo, Héctor Daer felicitó a los trabajadores que se sumaron a la protesta y sostuvo que la medida fue una demostración de la fuerza del sindicalismo frente a las políticas del Gobierno.

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Uno de los puntos más cuestionados por la CGT fue la estrategia comunicacional del Gobierno para desincentivar la huelga, especialmente los mensajes emitidos en estaciones de trenes con eslóganes en contra de la medida. “Es un mecanismo muy complicado que fue utilizado cuando se perdió la democracia”, advirtió Daer, en una fuerte crítica a la Casa Rosada.

Además, el dirigente de la Sanidad rechazó el comunicado oficial que calificó la protesta como un paro de “la casta sindical” y afirmó: "En Argentina no hay división por castas, pero sí podríamos diferenciar entre oligarquía y trabajadores".

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"Cuanta presión hicieron sobre tantos sectores, nos vendían que había lugares en que no iban a parar" dijo Héctor Daer.

El paro general incluyó el acatamiento parcial de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), lo que permitió que algunos colectivos circularan con normalidad. Sin embargo, se registraron ataques a pedradas contra algunas unidades, lo que generó controversia. Daer negó cualquier vínculo entre la CGT y estos hechos: "Nada tienen que ver con los trabajadores ni con las organizaciones sindicales".

Según la central obrera, la huelga fue convocada en respuesta a "la caída de los ingresos y el ajuste profundo que recae sobre las economías regionales y la obra pública".

Además de Daer, en la conferencia de prensa estuvieron presentes otros referentes sindicales como Carlos Acuña, Octavio Argüello, Andrés Rodríguez, Sergio Romero y Cristian Jerónimo.