A nueve meses de la desregulación del mercado de viviendas, las visiones entre las agrupaciones de inquilinos e inquilinas y el sector inmobiliario son totalmente contrapuestas. Preocupación por un lado y entusiasmo por el otro.
Creció la oferta, pero persisten los problemas
En las dos veredas reconocen que creció la oferta, pero la lectura que hacen de la situación actual es muy diferente. “Con la derogación de esa ley, el mercado fue mostrando señales de acercamiento entre oferta y demanda, y hoy hay más oferta”, aseguró Gonzalo Bosco, vicepresidente del Colegio de Corredores de la 1° circunscripción de la provincia de Santa Fe.
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Maiquel Torcatt / Aire Digital
Mauro Rueda, integrante de Inquilinos Autoconvocados de Santa Fe, coincide en cuanto al incremento de la oferta, pero afirma que no necesariamente es algo bueno: “Alquilar en Argentina es más dificultoso y más desigual”.
Según le comentó a AIRE, los relevamientos realizados indican que actualmente “alquilar un inmueble con dos ambientes significa alrededor del 50% de un salario promedio”.
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“El balance es totalmente negativo, la desregulación lo único que trajo fue un nivel de incertidumbre muy alto, aumentos cada vez más periódicos, morosidad creciente y caída en la demanda. Es negativo desde cualquier punto que se lo analice”, analizó por su parte Ariel D'Orazio, coordinador del Consejo Asesor de Vivienda e Inquilinos de Rosario.
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Bosco plantea que “la ley anterior fue nefasta, hizo que oferta y demanda se distancian demasiado. La realidad es que había mucha demanda, poca oferta y a raíz de eso los precios se elevaban mucho”.
D'Orazio retruca esa visión y afirma que el crecimiento en la oferta “es ínfimo a lo que había previo a la desregulación. Ahora, se ocasionó una caída en la demanda, lo que demuestra que el problema no lo resuelve la oferta”.
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Colegio de Corredores Inmobiliarios de Santa Fe Primera Circunscripción.
“Antes reservábamos departamentos sin siquiera mostrarlos, por fotos. Hoy eso no está pasando. Teníamos 20 consultas por un solo departamento porque no había. Cuando entraba un buen departamento te pedían el CBU y te hacían la reserva. Hoy no pasa eso”, destaca el corredor inmobiliario.
La compleja situación del sector inquilino
Uno de los grandes problemas que afecta a quienes alquilan es la suba del valor del alquiler, que en muchos casos, termina estando por encima de la inflación. La mayoría de los contratos se hacen por tres meses, luego le siguen los cuatrimestrales y los semestrales. Los índices más utilizados son el ICL y el IPC.
Según un informe de agosto de Inquilinos Agrupados:
- El 72% de los inquilinos que viven solos y alquilan son pobres.
- En hogares de 3 integrantes la pobreza alcanza a casi el 80%
- En los hogares con 4 o más integrantes sube al 88%.
“Observamos muchas personas buscando rescindir porque en menos de seis meses el alquiler se les duplicó y un poco más. A lo mejor, una persona que empezó pagando en enero 150.000 hoy ya paga 400.000 y tiene quizás proyectado un incremento más hasta fin de año”, indicó el Coordinador del Consejo Asesor de Vivienda e Inquilinos de Rosario
A su vez, el rosarino indicó que “estamos teniendo consultas por parte de inquilinos sobre la cuestión de la aplicación de intereses en una deuda para rescindir el contrato”. Luego agregó que “muchos garantes consultan luego de ser notificados por la morosidad de los inquilinos”.
Para ilustrar el clima de época que se observa, Mauro Rueda comentó que se empiezan a dar situaciones con mayor frecuencia que antes: “Vemos el fenómeno de chicos y chicas que empiezan a compartir habitación cuando antes alquilaban un departamento con varias habitaciones”.
Las organizaciones de inquilinos ponen el foco en la morosidad, que si bien no creció exponencialmente, comienza a convertirse en una preocupación.