Ambas fueron declaradas autores penalmente responsables de incendios reiterados en seis oportunidades, amenazas coactivas calificadas (por el uso de arma), amenazas coactivas simples y daños. No obstante, a Jésica Ramírez se le impuso la pena por la coautoría de amenazas coactivas calificadas.
El fallo fue luego de un juicio abreviado cerrado entre la fiscal del caso, Lucila Nuzzo, y la defensa de las dos imputadas y admitido por el juez penal Jorge Patrizi que impuso una pena de cinco años para Ramírez (Jésica Melisa) y tres a Ramírez (Miriam) quien cumplirá la sentencia mediante prisión domiciliaria en una vivienda de Colastiné Norte.
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Por el caso también se encuentran imputada y presa una familiar de las Ramírez, como también su pareja. En tanto, meses atrás, fue condenado meses atrás a tres años de prisión en suspenso Dionisio Héctor Cañete como parte del engranaje criminal.
Echaban a sus vecinos
La causa estableció que las condenadas, el hombre de apellido Cañete, las dos personas que están en preventiva y otro hombre que está prófugo actuaron de forma coordinada para generar focos ígneos en seis casas de vecinos mayores y menores de edad a los que pretendían echar del barrio.
La banda utilizó en algunos casos palos y ladrillo para romper puertas y ventanas de inmuebles y una vez adentro arrojaron hacia el interior líquido inflamable, para lo cual utilizaron botellas con trapos empapados en combustible tipo bomba Molotov.
Producto de los ataques, las casas quedaron completamente dañadas. Inclusive, según informaron desde Fiscalía, las llamas del fuego alcanzaron también una caballeriza y una camioneta.
Según los investigadores, la banda provocó los incendios para intimidar a las víctimas con el fin de que se mudaran, por lo que realizaron amenazas con un arma de fuego, un cuchillo, ladrillos, palos y piedras.
