El aloe vera es una de las plantas más queridas en los hogares argentinos. No solo por sus propiedades para calmar la piel o curar quemaduras, sino también por su fama de purificar el aire y aportar bienestar.
Pero, según el Feng Shui, la antigua filosofía china que busca armonizar los espacios, no alcanza con tenerla en cualquier lado. El lugar donde pongas tu aloe vera puede cambiar por completo la energía de tu casa.
¿Dónde hay que poner el aloe vera para aprovechar todos sus beneficios?
Aunque muchos eligen la cocina o el baño para ubicar sus plantas, el Feng Shui es claro: el aloe vera debe ir en el dormitorio.
Esta elección no es casual. En la tradición china, el dormitorio representa el descanso, la intimidad y el equilibrio personal. Colocar una planta purificadora como el aloe vera en ese ambiente ayuda a limpiar el aire y a crear un clima sereno, ideal para dormir mejor y reducir el estrés.
Aloe Vera
Suculenta que puede purificar el aire
Además, el aloe vera tiene una particularidad: durante la noche absorbe dióxido de carbono y libera oxígeno, lo que mejora la calidad del descanso. Un dato clave para quienes buscan un sueño reparador.
Un tip extra: dejá la puerta del dormitorio abierta la mayor parte del tiempo. Así, la energía (el famoso “chi”) circula libremente y se potencia el efecto armonizador de la planta.
El baño es uno de los sitios menos recomendados. En esta filosofía, se asocia con la eliminación y el drenaje de la energía, por lo que poner el aloe vera ahí puede “debilitar” su poder y hacer que la prosperidad se escape junto con el agua.
Tampoco es buena idea ubicarla en la cocina. El fuego y los cambios bruscos de temperatura pueden afectar tanto la salud de la planta como su capacidad de equilibrar la energía del ambiente.
Y, por supuesto, evitá los espacios oscuros o desordenados. El aloe vera necesita luz solar indirecta para crecer fuerte, y el desorden bloquea el flujo del chi, anulando cualquier efecto positivo.