En promedio, comienza a dar frutos entre los cinco y siete años después de la plantación, aunque este plazo puede variar según el clima, el tipo de suelo y si se utilizaron injertos. En condiciones favorables, puede rendir cosechas abundantes y de excelente calidad durante décadas.
LEER MÁS► Vinagre en tu lengua de suegra: para qué sirve y cuáles son sus beneficios
Cómo cuidar un árbol de pistacho
Para crecer fuerte y sano, el árbol de pistacho necesita pleno sol, suelos bien drenados y poca humedad en las raíces. El exceso de agua puede provocar pudrición y comprometer su desarrollo.
Durante los primeros años, el riego debe ser moderado pero constante. A medida que la planta crece, se puede espaciar la frecuencia para que se adapte a condiciones más secas.
La fertilización también es esencial: se recomienda aplicar un abono balanceado en primavera, antes del inicio del ciclo vegetativo, para estimular el crecimiento y la futura fructificación.
El árbol de pistacho puede dar frutos durante décadas si se cultiva en un clima cálido y seco.
El árbol de pistacho puede dar frutos durante décadas si se cultiva en un clima cálido y seco.
Poda y protección del árbol
La poda anual ayuda a mantener la copa aireada y permite una mejor entrada de luz, además de eliminar ramas secas o improductivas. En las primeras etapas, conviene proteger al árbol de las heladas, ya que las bajas temperaturas pueden dañar su estructura joven.
Con un manejo adecuado y un clima cálido y seco, el pistacho se convierte en una fuente duradera de frutos y una especie ideal para quienes buscan combinar estética y producción. Requiere paciencia, pero el resultado final —una cosecha casera de pistachos frescos— vale totalmente la espera.
LEER MÁS► Poner tapitas de botella alrededor de los tallos de las plantas: para qué sirve