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Desde el sofá El conjuro | película | Cine y series

Final explicado de "El Conjuro 4: últimos ritos": qué significan las escenas en los post-créditos

La película El Conjuro 4: últimos ritos concluye la historia de Ed y Lorraine Warren con un emotivo final cargado de simbolismo y terror.

El Conjuro 4: Últimos Ritos marca el esperado cierre de la saga de Ed y Lorraine Warren, quienes dedicaron su vida a la investigación de fenómenos paranormales. En esta película, la franquicia se despide de sus protagonistas con una historia de terror que fusiona emociones intensas y momentos de gran simbolismo.

Final explicado de "El Conjuro 4: últimos ritos"

La trama arranca con una escena en 1964, cuando Lorraine, embarazada de Judy, investiga un espejo antiguo, el cual se rompe al ser tocado. A los pocos minutos, Judy nace muerta, pero es revivida por su madre.

El espejo, fuente de una maldición ancestral, regresa a la vida de la familia Smurl años más tarde, desatando una serie de fenómenos aterradores que incluyen caídas de objetos, voces extrañas y apariciones inquietantes.

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La presencia demoníaca se hace más fuerte a medida que avanza la historia, y el objetivo del demonio se vuelve claro: buscar a Judy, quien, desde su nacimiento, ha estado marcada por el maldito espejo.

Al final, con la ayuda de Ed y Lorraine, Judy enfrenta esta amenaza sobrenatural. Usando sus habilidades psíquicas y el poder de la oración familiar, logran destruir el espejo, liberando a la familia Smurl del tormento que habían sufrido durante años.

Los Warren enfrentan su caso más aterrador en el cierre de la saga El Conjuro.
Los Warren enfrentan su caso más aterrador en el cierre de la saga El Conjuro.

Los Warren enfrentan su caso más aterrador en el cierre de la saga El Conjuro.

El simbolismo del espejo y el legado de los Warren

El final de El Conjuro 4 no solo cierra la saga, sino que también resalta temas profundos como la fe, el sacrificio familiar y el legado. En la emotiva boda de Judy, Ed la acompaña al altar junto a Tony, su prometido. En el evento, los fanáticos podrán reconocer caras familiares de otras entregas de la saga, como Carolyn Perron y su hija Cindy, Janet Hodgson y David Glatzel, lo que ofrece un guiño a los casos anteriores de los Warren.

En una charla íntima durante el festejo, Lorraine tiene una visión de un futuro lleno de paz, donde se ve a su familia envejeciendo tranquilamente, disfrutando de los momentos en familia. Esto refuerza la idea de que la saga de los Warren finalmente llega a su fin, con un retiro merecido y lleno de paz. A nivel simbólico, el espejo se presenta como un objeto que marca tanto el comienzo como el final de la historia. Representa no solo el mal que persigue a la familia Smurl, sino también el legado de los Warren, que, al final, es transferido a Judy.

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El final con dos escenas postcréditos

El Conjuro 4 ofrece dos escenas postcréditos que completan el círculo de la saga. La primera es un emotivo homenaje a Ed y Lorraine, con imágenes reales de los Warren acompañadas de textos que recuerdan su legado, la publicación de su libro y su influencia en el mundo paranormal. Además, se hace mención de su fallecimiento en 2006 y 2019,

En la segunda escena, el "espejo conjurador" —el artefacto central de la saga— se muestra como un símbolo de misterio, reforzando su vínculo con toda la franquicia. Esta secuencia deja abierta la posibilidad de nuevas películas, posiblemente protagonizadas por una nueva generación de investigadores paranormales, con Judy y Tony liderando el camino.

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El cierre de El Conjuro 4: Últimos Ritos marca el final de la saga, a la vez que encapsula el viaje humano y profesional de los Warren. El triunfo del amor y las creencias sobre las fuerzas del mal, representadas por el espejo y los demonios que lo habitan, concluye con una sensación de esperanza.