“Estimamos que en un plazo de aproximadamente 15 días estaremos preparados para brindar la ayuda (…). Esperamos ayudar a 650 mil personas en un primer momento”, dijo en rueda de prensa Francesco Rocca, presidente de la Federación Internacional de la Cruz Roja y la Media Luna Roja, en Caracas.
¿Cómo ayudamos a mejorar la vida de las personas en Venezuela?
Por ejemplo, colaborando con 4 hospitales del país en el mantenimiento de su infraestructura para sus servicios de emergencia durante 2018. pic.twitter.com/QzbBzfKKwI
— CICR Venezuela (@CICR_ve) 28 de marzo de 2019
Rocca subrayó que la organización actuará de acuerdo a sus principios de “imparcialidad, neutralidad e independencia” que requiere el envío de cargamento para que pueda considerarse ayuda humanitaria, “sin aceptar interferencias” de uno y otro lado.
En medio de aguda escasez de alimentos básicos y medicinas, el ingreso de ayuda humanitaria se ha convertido en uno de los elementos centrales del pulso por el poder entre Maduro y Guaidó, este último reconocido como presidente encargado de Venezuela por más de 50 países, encabezados por Estados Unidos.
El pasado 23 de febrero, cargamentos de comida e insumos médicos gestionados por Guaidó y enviados por Washington a Colombia y Brasil fueron bloqueados por el gobierno chavista en medio de disturbios que dejaron unos siete muertos y decenas de heridos.
Maduro alegó que esas cargas eran una “excusa” para una intervención militar con el objetivo de apartarlo del poder. Además, denunció una campaña de los medios internacionales para retratar una crisis humanitaria en Venezuela que, según aseguró, no es tal.
Rocca expresó disposición de la Cruz Roja a trabajar con esa ayuda acumulada en las fronteras de Colombia y Brasil con Venezuela, pero bajo las reglas de la institución.
“Ese fue un tema que fue muy politizado (…). Si esa ayuda cumple con nuestras reglas y nuestros protocolos, claro que estamos dispuestos a distribuirla”, dijo.
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