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Actualidad Coronavirus | vacuna | Aire Digital

Advierten que las campañas de difusión serán claves para la vacunación de los Qom y los Mocoví

En Santa Fe y Recreo, los referentes de las comunidades dicen que hay que informar bien a los vecinos para evitar que surjan desconfianza y resistencias, como sucedió con los pueblos originarios en otros países. Como toda decisión, se analizará en asamblea.

En momentos en que los gobiernos nacional y provincial buscan poder acceder a las dosis necesarias para avanzar con la vacunación de la población contra el coronavirus, los referentes de las comunidades Qom y Mocoví manifiestan la necesidad de llevar adelante campañas de difusión que colaboren a informar a los integrantes de su comunidad sobre las vacunas y sus características.

En el noroeste de la ciudad, la comunidad Qom entremezcla realidades y hábitos ancestrales con conocimientos del siglo XXI. Desde hace 30 años las viviendas que se levantaron para los integrantes de las primeras familias que llegaron a la zona sufrieron diversas ampliaciones. Por su estructura se las puede identificar, desde Menchaca a Boneo, en un perímetro que abarca unas doce cuadras de pasajes cubiertas en su mayoría con chapas o alambrados.

Las costumbres se mantienen, entre ellas el dialecto toba es usado entre los integrantes en la rutina diaria. Además las decisiones aún hoy se toman en el ámbito de asamblea, y es en esa instancia en la que se deberá discutir si en un futuro cercano se vacunará o no a los integrantes de la comunidad, que suma un total de 100 familias.

Los grupos familiares se reúnen en los patios, bajo la sombra de algún árbol amigo, para compartir la mañana. Los chicos corren en las calles junto a sus perros que siempre los acompañan. La rutina de los integrantes de la comunidad está marcada por el encuentro con la familia, ya sea para compartir una charla o un mate o colaborar con los trabajos.

Eusebio Cabrera, referente y cacique de la comunidad, asegura que aún no se reunieron para hablar al respecto ni tampoco se ha evaluado la posibilidad de llevar adelante una campaña de vacunación.

Los Qom no fueron ajenos a los efectos de la pandemia, muchos casos se registraron entre sus integrantes y además, sus economías y trabajos sufrieron las consecuencias de la cuarentena.

El caso de Estela es un claro ejemplo. Ella y su hija trabajan todos los días en la elaboración de productos como canastos, bolsos e individuales fabricados con hoja de palma. Sobre la mesa de su comedor exhibe orgullosa el trabajo que logró utilizando sus manos. Un canasto puede demandar desde dos a cuatro semanas de elaboración y esto dependerá de los detalles que el objeto tenga. "Ahora estamos trabajando en unos individuales que nos encargaron", cuenta entusiasmada sobre el trabajo que le llevará casi un mes.

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Estela vive en barrio Las Lomas desde hace más de 30 años, a diario trabaja para elaborar sus productos que ofrece en la vía pública los sábados.

Estela vive en barrio Las Lomas desde hace más de 30 años, a diario trabaja para elaborar sus productos que ofrece en la vía pública los sábados.

Durante la semana Estela trabaja para poder salir los sábados puerta por puerta a ofrecer la mercadería. "Es difícil", asegura, aunque no pierde el ánimo.

Un caso similar se da en la familia que encabeza Luis Méndez, artesano de cerámicas. Junto a su familia trabaja en el patio trasero de su vivienda, sus nietas ayudan a pintar las distintas piezas que el sábado partirán en la bicicleta al centro de la ciudad. Onoria, la esposa de Luis, saca lo suyo con la producción de canastos, macetas y bolsos. Ante la escasez de hojas de palma, se las rebusca y trabaja con botellas de plástico descartables.

Como sucede en algunos sectores de la sociedad, la desconfianza está latente entre algunos de los integrantes, Cabrera es consciente que se deberá realizar un trabajo importante de comunicación. Algunos desconfían de la aplicación de la vacuna, eso seguramente va a pasar dentro de la comunidad, se va a trabajar mucho para ver cómo, quién quiere, quién no. Es una buena charla y un tema para discutir dentro de la comunidad”, expresó en diálogo con Aire Digital.

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Luis Mendez es artesano y trabaja en la producción de piezas de cerámica.

Luis Mendez es artesano y trabaja en la producción de piezas de cerámica.

Para exponer sobre la mesa la posibilidad de vacunarse, los Qom deberán reunirse en asamblea. Allí, el cacique deberá comunicar a cada jefe de familia la posibilidad de recibir la inoculación. La decisión a tomar, ya sea si aceptan o rechazan la vacuna contra el coronavirus, dependerá de cada miembro.

Cabrera es optimista ante la posibilidad de lograr que su pueblo se vacune. “Si logro que haya vacunas para la comunidad, yo me la voy a aplicar primero”, adelantó el cacique que padeció coronavirus y logró recuperarse.

Las curas y tradiciones ancestrales conviven con los Qom, con una gran amplitud en su historia. Muchos de ellos aseguran que se curaron tomando té de palo santo, una madera que se consigue en el Chaco.

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Los más chicos transitan las calles del barrio con tranquilidad.

Los más chicos transitan las calles del barrio con tranquilidad.

La asamblea de los Mocoví

La comunidad Mocoví ubicada en Recreo está conformada por unas 600 familias, en su mayoría lideradas por personas jóvenes que conviven con las costumbres y tradiciones de los ancianos. La organización basada en tribus colabora a transmitir la información que se requiera a las familias que las conforman y cuyos integrantes están en permanente contacto.

Antonio Gómez es un reconocido líder tribal, maestro bilingüe y un referente al momento de hacer valer los derechos de su gente.

La toma de decisiones y la transmisión de temas trascendentales se abordan de manera tribal entre los integrantes. Esto implica que cada una de las ocho tribus que hoy conviven en Recreo, las cuales están conformadas por entre 15 y 30 familias, dialoguen en torno a los problemas o aspectos inherentes a su vida social, económica y laboral. “Todavía funciona así, como comunidad –aclara Gómez–. En la familia grande están los abuelos, tíos, etc”.

Cada tribu posee un líder, que es la persona en la que la comunidad delega el poder para dialogar y transmitir los aspectos vinculados con su vida. “Hay líderes fundamentales que llevan siempre adelante las cuestiones comunitarias. Por intermedio de ellos se maneja una tribu”, explica Gómez.

El primer eslabón en la cadena de comunicación es el cacique o líder, este transmite los mensajes o decisiones a través del consejo, desde donde se va informando al resto de la comunidad.

Vamos transmitiendo lo que nos van informando, precisa el cacique. Somos todos familias conocidas y vivimos comunitariamente”. El hecho de vivir en comunidad y que la familia sea el eje de la convivencia facilita que la información se replique entre todos.

Conocedor de las opiniones de sus vecinos, Gómez no duda en que estos aceptarán aplicarse la vacuna contra el covid-19 una vez que llegue el momento. Conscientes de la peligrosidad que el virus conlleva y con el antecedente de que muchas familias lo padecieron, afirma que hasta ahora no hay objeciones a la vacunación.

En este contexto favorece el hecho de contar con un centro de salud cuyos profesionales lograron ganarse la confianza de los vecinos y a diario trabajan en la concientización y difusión de información en torno a las consecuencias que trae el coronavirus.

Sin embargo, recalca que se precisará una campaña de información y difusión adecuada. “Tiene que haber un aviso previo –asegura–. Los referentes creemos que es necesario porque tiene que ver con la salud. No tendríamos que decir que no, ni desconfiar”.